general motors uber

La compañía automovilística ha invertido 500 millones de dólares en Lyft, una empresa de San Francisco que dispone de unos servicios parecidos a los que ofrecen Uber y Blablacar.

Los coches de Lyft se distinguen por un bigote rosa en el frontal del automóvil que parece un peluche, y su funcionamiento consiste en que si alguien quiere ir de una lado a otro de la ciudad, busca un conductor de esta firma que esté disponible, con una tarifa básica a la que se le puede añadir una propina.

Valorada en cerca de los 4.5000 millones de dólares, Lyft contará ahora con General Motors como socio, que no sólo se presenta como mero inversor sino que pondrá en funcionamiento un coche autónomo que ofrezca este tipo de servicios de movilidad. De momento esta práctica ya está funcionando en Japón, donde están probando un taxi conducido por un robot.

Este tipo de iniciativas son una muestra del gran cambio que sufrirá la movilidad en los grandes centros urbanos de todo el mundo en los próximos 5 años.

Para los alcaldes de estas urbes, la contaminación será la causa principal para reducir el volumen de tráfico y de automóviles que puedan circular por el centro de la ciudad.

Por ello se irán implantando paulatinamente soluciones de movilidad como Car2Go, transporte público, taxi o servicios como Uber. Precisamente en el caso de esta compañía, Google, su máximo accionista, trabaja con Ford para la creación de un coche autónomo, creando sinergias con expertos en Big Data, comunicaciones y mapas que hagan rentable el proyecto.

Ver noticia completa