Ciberseguridad: la asignatura pendiente de las empresas españolas

En los últimos cuatro años los ciberdelitos en nuestro país se han incrementado en un 60%, según los datos de la Dirección General de la Policía Nacional; a éstos se suman los ataques registrados por el CNI, y los detectados por los órganos de ciberseguridad de Defensa. Con estos datos en la mano, urge tomar conciencia de la necesidad de generar medidas en el ciberespacio para afrontar la seguridad, tanto en el plano privado como en el ámbito profesional.

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Es cierto que, a nivel Institucional, España cuenta con una Estrategia de Ciberseguridad Nacional. Pero es en el plano empCiberseguridad: la asignatura pendiente de las empresas españolasresarial en el que se hacen más evidentes las carencias en materia de seguridad: el 64% de las compañías utiliza sistemas de seguridad obsoletos, y no tienen un programa formal de inteligencia contra las amenazas de ciberseguridad.

Así lo ha puesto de relieve el Salón Internacional de Tecnologías de Seguridad Nacional, HOMSEC 2017. Según esta organización, la protección digital debe ir desde la defensa de los datos más simples, empezando por los comerciales de las empresas, hasta los detalles más mínimos de nuestro día a día.

Y es que la amenaza se hace más grande a medida que el Internet de las cosas se consolida, interconectando cada vez más aparatos de nuestra vida cotidiana, y haciendo, por tanto, que sea más fácil que queden lagunas o agujeros de seguridad.

El 86% de los miembros de los consejos de administración y altos ejecutivos afirman que las medidas de seguridad implementadas por sus compañías no son capaces de responder a las necesidades del negocio.

Cinco nuevas ciberamenazas a las que debemos hacer frente

  • Las apps maliciosas. Las aplicaciones para móviles guardan datos personales muy valiosos para los hackers: desde las preferencias y la localización de los usuarios hasta los datos bancarios en aquellas que permiten compras. A lo largo de este año, los cibercriminales se centrarán en explotar las debilidades de las apps y desarrollar versiones con virus.
  • Los riesgos de los videojuegos. Uno de los motivos por los que la amenaza de los virus sobrevuela a los gamers es que los usuarios aún no hacen lo suficiente para protegerse: el 53% no usa ningún tipo de antivirus y, de los que sí lo hacen, el 36% lo desactiva cuando juega para que no afecte al rendimiento del equipo.
  • Internet de las cosas. La ecuación es sencilla: a más aparatos conectados, más riesgo de ataque. Se teme que en 2017 aumenten los delitos de secuestro de estos objetos, es decir, que se instale un virus que bloquea, por ejemplo, una cámara de seguridad, y se pida dinero a cambio de desbloquearla. Esto es lo que se denomina ransomware.
  • Los gadgets de la salud. Según la consultora Gartner, para 2017 habrá más de 322 millones de weareables (como relojes inteligentes, bandas deportivas y monitores de glucosa) conectados a Internet, y de acuerdo a los expertos del foro ESET, el 39% de las empresas de salud no sabe cómo protegerse ante un ciberataque. Esta situación plantea un escenario perfecto para los hackers, que pueden obtener datos confidenciales sobre la identidad de los pacientes.
  • La nube tampoco está a salvo. A pesar de que las compañías de cloud computing invierten muchísimo dinero en mejorar su seguridad, el hecho de que cada vez más empresas opten por la nube hace que los ataques se dirijan cada vez más hacia estas nuevas infraestructuras.  Infectar con un virus a un proveedor de servicios cloud afectaría a todos los clientes que almacenan sus datos allí, que son cada vez más.

Los próximos retos en materia de ciberseguridad pasan, en gran medida, por la concienciación en la empresa privada de la adopción y aplicación de tecnologías adecuadas, para que el desarrollo de éstas no traigan como consecuencia problemas que pueden ser evitables.

 Fuente Dealerworld