Los restaurantes del futuro: más digitales e inteligentes

Las nuevas tecnologías están transformando incluso los sectores más tradicionales, y la hostelería no es una excepción. Los cambios de hábitos motivados por los ritmos de vida actuales, la fuerte penetración de Smartphones y apps y el auge de la economía colaborativa están empujando al sector de la restauración hacia la digitalización.

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La transformación tecnológica tiene la capacidad de provocar cambios disruptivos en aspectos básicos del restaurante, desde la gestión hasta la experiencia gastronómica. Así lo refleja el informe “Hacking the restaurant experience”, elaborado por Reimagine Food en colaboración con Makro.

Este estudio advierte de que las cartas digitales, las mesas interactivas o el pago a través del móvil son ya una realidad en muchos restaurantes.

¿Y hacia dónde irá el futuro de la restauración? Reimagine Food apunta hacia la inteligencia artificial, la robótica y el big data, que serán claves para ofrecer un servicio personalizado a los clientes.

Digitalización: conectando con el cliente

Durante los últimos años, las redes sociales y las plataformas de reservas online han ganado un enorme peso en el sector: un 70% de los clientes acceden ya a los restaurantes a través del llamado “umbral digital”.

Los restaurantes del futuro: más digitales e inteligentesEn la actualidad, el cliente es cliente desde mucho antes de entrar en el local y también mucho después de abandonarlo. Es decir, la experiencia gastronómica se ha “extendido” en el tiempo, generando no uno, sino tres momentos clave: captación, consumo y reputación.

Pero además, el boom del “food delivery” hace que el restaurante ya no tenga una única localización, sino que se traslada a casa de cada cliente: si hace pocos años pedir comida a domicilio era sinónimo de pizza y chino, la oferta actual es enorme y se extiende prácticamente a la totalidad de las comidas.

En general, el restaurador español es consciente de la importancia de la digitalización para su negocio: un 50% de propietarios de restaurantes españoles consideran la tecnología como un factor muy importante para la buena marcha de sus negocios. Un porcentaje superior a la media europea, donde por ejemplo los empresarios que creen que la digitalización es importante no llega al 40%.

En los próximos años, la revolución saldrá de los sistemas de reserva y se trasladará a la propia mesa del comensal en el restaurante.

Tendencias de futuro: inteligencia artificial, robótica y big data

Los avances tecnológicos permiten ganar efectividad, no sólo en la gestión del negocio sino también en la del cliente, transformando la experiencia en el restaurante.

Diferentes soluciones novedosas se van implantando poco a poco, desde la implantación de sistemas de pago a través del móvil, hasta las cartas digitales interactivas; éstas tienen funcionalidades tan diversas como descubrir el origen de los alimentos o consultar las calorías de un plato.

Marius Robles, CEO de Reimagine Food, pronostica que en un futuro próximo, “la inteligencia artificial, la robótica y el big data irrumpirán en los restaurantes, permitiendo la personalización de los menús en base, por ejemplo, a las necesidades nutricionales de cada cliente o agilizando las esperas”.

La innovación tecnológica no implicará, sin embargo, la desaparición de los restaurantes tradicionales, sino que convivirán tres tipos de espacio que cubrirán diferentes necesidades de consumo:

Restaurantes inteligentes (o de conocimiento), donde exploraremos emociones desde una perspectiva multidimensional, con un alto componente tecnológico, y donde incluso las cocinas estarán conectadas con sus proveedores habituales.

Restaurantes de rendimiento, muy funcionales y con un claro foco en la personalización, en los que reinarán conceptos como healthy y wellness.

Restaurantes de placer, donde el objetivo será simplemente disfrutar.

De lo que no cabe duda es que el restaurante del futuro, sea con mantel de cuadros o con mesas interactivas, será más digital e inteligente” señala Marius Robles. Ya no basta con productos de calidad, platos atractivos o interiorismos impactantes. El consumidor demanda experiencias gastronómicas personalizadas, únicas y de vanguardia en las que se estimulen todos los sentidos.

Fuente Origenonline