El último capítulo del estudio Clientes@2033, elaborado por PWC y con la colaboración técnica y académica de ICEMD, aborda el ecosistema tecnológico en torno a la economía digital, y los elementos que podrán ser útiles en el futuro.
Los sensores son uno de ellos: dispositivos que pueden medir magnitudes físicas o químicas, denominadas variables de instrumentación, y transformarlas en variables eléctricas. Los adelantos en materia de sensores llevarán a una mayor capacidad de autonomía. Además al estar conectados a la Red podrán generar importantes avances sobre las pautas de consumo. Dando un paso más, la relación de los sensores con la inteligencia artificial generaría procesos automáticos revolucionarios tanto para el consumo como para la gestión del consumidor, por citar solo algunas de sus dimensiones.
Las Smart-cities van hacia un modelo urbano más eficiente fundamentado en la colaboración público-privada. La aplicación de la tecnología en las políticas de urbanismo está generando una nueva forma de entender la evolución de las ciudades, esbozando un escenario futuro que se perfila como una auténtica revolución de la forma de interrelación del individuo con su entorno más inmediato. Son muchas las posibilidades que se abren: coches autónomos y casas inteligentes, ciudades sostenibles y, en definitiva, adelantos en materia de inteligencia artificial usando Big Data, Cloud Computing y sensores.
Otro de los elementos que cobrarán relevancia son los wearables. Algunas estimaciones indican que las empresas, en los próximos cinco años, podrían ahorrar cerca de 700 millones de euros al mejorar sus procesos productivos y la eficiencia de sus empleados aplicando la tecnología wearable. El internet de las cosas está cada vez más cerca.
El Big Data se configura como otro de los grandes pilares del avance. La incapacidad para gestionar el elevado volumen de datos que se producen en la actualidad está generando enormes ineficacias en las empresas y organizaciones con elevados costes de oportunidad. La información sin análisis y prescripción no es útil porque no proporciona valor añadido. La idea es evolucionar hacia paradigmas deben asegurar una mayor interacción de flujos informativos con efecto multiplicador del valor de la información, así como también un incremento tendencial hacia la toma de decisiones soportadas por datos.
Asimismo el Cloud Computing es relevante no solo porque plantea grandes oportunidades para los emprendedores, ya que el depósito de la información en la nube está cambiando la forma que se tiene de entender la propia información: se está pasando de un modelo estructurado a un modelo semiestructurado fundamentado en la diversidad de datos, fuentes y códigos. El re-marketing continua como tendencia al alza, apoyada en estas tecnologías.
El 3D Printing se ha convertido en el mayor exponencial de un movimiento mundial que está revolucionando los procesos industriales. No obstante, en la actualidad ya se utilizan otras tecnologías sustentadas en los mismos principios: el escaneado 3D o el corte láser, entre otras. Por otra parte el uso creciente de la Realidad Aumentada hace prever un futuro en que la interacción entorno físico-digital se produzca con una mayor integración. Asimismo, en robótica en la actualidad ha irrumpido como elemento novedoso la robótica de servicios, es decir, robots con un cierto nivel de inteligencia que ayudarán en tareas cotidianas. Esta rama de la robótica es lo que tiene mayor campo de desarrollo cara al futuro y algunas empresas como Google ya se están dando cuenta.
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