El cuerpo humano como vía de seguridad

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Científicos e ingenieros de la Universidad de Washington han creado una vía para enviar contraseñas seguras a través del cuerpo humano, mediante sensores de huellas digitales capaces de transmitir información.

Actualmente utilizamos ondas de radio por el aire, mediante sistemas como WiFi o Bluetooth, para enviar códigos o claves secretas que pudieran ser interceptados, ya que las transmisiones son vulnerables a piratas informáticos capaces de romper el código cifrado.

El cuerpo humano como vía de seguridadPor esta razón un grupo de científicos de la Universidad estadounidense de Washington  han ideado un sistema que, a través de transmisiones de baja frecuencia no dañinas, usan sensores como las huellas digitales de los teléfonos móviles o los ratones táctiles del ordenador, para identificar al usuario. De esta manera envían dicha información a través del cuerpo humano hasta, por ejemplo, una cerradura electrónica.

Estas transmisiones en el cuerpo constituyen una nueva manera segura de transmitir información de autentificación entre dispositivos que tocan partes del cuerpo, como puede ser un dispositivo médico portátil o la cerradura de una puerta inteligente. Así mediante el teléfono o dispositivo móvil se confirma la identidad del usuario, que deberá escribir una contraseña.

Se trata de aprovechar las señales que ya se generan en distintos sensores para transmitir los datos de una forma novedosa.

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Así lo explica un artículo que se presentó en el congreso sobre computación UbiComp 2016, celebrado en Alemania. Tal como cuenta el co-autor principal de la invención, Merhdad Hessar, “puedo tocar el pomo de la puerta y a la vez el sensor de huellas dactilares de mi teléfono y transmitir mis credenciales secretas a través de mi cuerpo al abrir la puerta, sin que esa información personal atraviese el aire”.

Para el desarrollo de la investigación, los científicos realizaron pruebas a 10 participantes, generando transmisiones corporales aprovechables en personas de diferentes alturas, pesos y tipos de cuerpo, así como en movimiento o dormidos. Los receptores pueden albergarse en cualquier lugar del ser humano, como las piernas o manos, continuando con su funcionamiento.

El uso de “contraseñas corporales”

Este tipo de tecnología podría ser útil para transmitir las claves a dispositivos médicos, como monitores de glucosa o bombas de insulina.

La velocidad de transmisión alcanzada, de 50 bits por segundo en paneles táctiles portátiles y 25 bits por segundo en sensores de huellas dactilares, tiene una rapidez como para enviar la contraseña en segundos.

Según los investigadores, este es solo un primer paso hasta que los fabricantes de sensores de huellas digitales quieran proporcionar acceso a su software.

La investigación ha sido financiada por un premio de Google, por la Fundación Nacional de Ciencia y el Centro de Ciencia y Tecnología para Computación Ubicua de Intel.

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