preparación tecnológica

España ha descendido cinco puestos en la clasificación de países más innovadores del mundo desde 2015. A pesar de todo, ha mejorado su capacidad para atraer talento y capital de riesgo.

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En el top 30 de preparación tecnológica

España se ha estancado en términos de innovación y preparación tecnológica, frente al avance de otras potencias europeas. Sí es cierto que se aprecia un uso creciente del Big Data, se ha multiplicado el número de startups, y se han incorporado nuevos players al entramado empresarial.

El informe de “Competitividad Global 2017-2018” del Foro Económico Mundial, España se sitúa en la posición 42 del ranking de innovación, cinco puntos por debajo de la posición que ocupaba hace tres años. Una caída parecida se experimenta en la preparación tecnológica, donde ahora ocupa la posición 28, frente al 25 de 2016.

El país continúa en el top 30 del ranking global de preparación tecnológica y su nota media aumenta año tras año. Pese a ello, países como Suiza, Luxemburgo, Francia, Reino Unido o EE.UU, adelantan a España. En cuanto a innovación, es superada por Islandia, Portugal, Qatar, Azerbaiyán, Kenia o Sudáfrica.

La poca capacidad de innovación es una de las principales causas que impiden el desarrollo y evolución de las empresas españolas. A esto, se suma la ineficiencia de la burocracia gubernamental, las tasas impositivas y las regulaciones laborales. España aprueba raspado en materias como la colaboración entre empresas e instituciones educativas o la inversión en investigación y desarrollo. Por su parte, suspende en la capacidad del Gobierno para fomentar la innovación y en la disponibilidad de talento digital y de profesionales científicos.

Necesario fomento de la innovación

La adopción tecnológica de las empresas españolas se mantiene estancada. En este aspecto, España se mantiene en el puesto 53, pero su puntuación desciende del 4,7 al 4,6 sobre 7.  Tanto es así que el 80% de las pymes españolas no usa ningún tipo de solución cloud, según el último informe del Observatorio Nacional de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información.

También se da un paso atrás en la disponibilidad de las últimas tecnologías y en la entrada de tecnología por la inversión extranjera. Sin embargo, España destaca positivamente por su grado de conectividad y en el acceso de las escuelas a internet, donde se asciende de la posición 63 a la 46.

Todo esto se ve atenuado por el avance en materia de startups, que ha mejorado respecto al número de días para empezar un negocio, que ahora mismo se sitúa en torno a 13, la capacidad de atraer talento o la atracción de inversión de capital de riesgo. En este sentido, España asciende del puesto 41 al 37 en la capacidad de las startups para atraer financiación de venture capital.

Fuente Modaes

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