Personalizar para sorprender al nuevo cliente

prodware logotipoLa transformación del consumidor y la evolución del mercado condicionan cada vez más las estrategias de venta de las empresas. Ofrecer productos adecuados a cada cliente potencial aumentará las posibilidades de éxito, algo sencillo si se dispone de un configurador de producto capaz de personalizar en masa según los deseos del usuario.

Sorprender al consumidor es la estrategia de muchas empresas para acercarle a la marca y transformarlo en cliente. La personalización de productos es una de las formas de lograrlo. El consumidor actual agradece la oportunidad de crear sus propios productos desde casa y en tiempo real.

Con los configuradores es posible disponer de una gran variedad de productos a medida fabricados en serie. Se trata de una herramienta indispensable para empresas que producen artículos claramente configurables, como las de sector de la informática, de la moda o de la fabricación de mobiliario o de automoción.

Personalizar para sorprender al nuevo clientePersonalizar para diferenciarse

La reducción de las barreras de entrada ha incrementado la competencia. En este contexto, si una compañía no se adapta a las necesidades del cliente, otra lo hará. Por eso, la personalización ya no es algo opcional. Para sobrevivir, es imprescindible incorporarla entre las principales estrategias de negocio.

Los compradores tienen altas expectativas en cuanto a la personalización. Para garantizar un resultado óptimo, es necesario coordinar diversos departamentos de la empresa a lo largo de la producción y venta. Por eso, a la hora de plantearse esta opción, las compañías deben ser conscientes de la complejidad del proceso.

El configurador como estrategia de negocio

Convertir el configurador de producto en pieza central de la estrategia de la empresa requiere la implicación de todos los departamentos. Además, es necesaria una completa planificación de todas las combinaciones válidas. Los beneficios son claros: satisfacción del consumidor, fidelidad de marca y retención de clientes.

Asegurar la calidad de todos los procesos (configuración, diseño, fabricación, comercialización, entrega, servicio posventa…) exige herramientas de configuración que respondan a criterios industriales y comerciales. Ambos deben estar perfectamente conectados para que el pedido se gestione directamente en fábrica tras el encargo.

Cada vez más fácil, cada vez más rápido

Gracias a las soluciones de planificación y fabricación, cada vez más completas y ágiles, es posible crear patrones personalizados de forma barata y diseñar artículos a medida sin necesidad de complejas modificaciones ni cortes de producción. De cara al cliente, estas herramientas deben presentar una navegación sencilla, visual y con instrucciones claras.

A nivel interno, el configurador se alía con los sistemas ERP para favorecer el flujo de información entre procesos y departamentos. No obstante, para que el cliente pueda personalizar realmente sus propios productos las empresas se enfrentan al desafío de conocer en profundidad sus necesidades específicas para ofrecerle las soluciones adecuadas en cada momento.