jefe liderazgo

Está claro que ser jefe implica muchas cosas, entre ellas más responsabilidad y pasar del “yo” al “nosotros”. Los jefes malos, malísimos son los que no escuchan, los eternamente cabreados, los que no aceptan ideas ajenas, etc. ¿Que tal si vamos un poco más allá?

Las 4 claves (reales) para saber si tienes un jefe estupendo #liderazgo Clic para tuitear

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Con criterios parecidos vamos a hurgar un poco más en lo que sucede en la realidad de las empresas para saber si estamos en el lugar correcto con 4 claves. Hay muchas más, pero estas me han parecido las más contundentes.

 Un jefe estupendo se rodea de personas aún más estupendas

Los líderes fuertes siempre contratan (o tratan de hacerlo) a personas que sean capaces de engrandecer su visión, no como meros “solucionadores” de problemas (que es lo más habitual).

Eso significa que confían tanto en sí mismos como para contratar a otras personas que puedan mejorar su gestión. Los jefes mediocres, en ese sentido, solo necesitan gente que ejecute órdenes y que no cuestione nada. Ya sabes el dicho ¿para qué contratar a personas inteligentes que sólo van a cumplir órdenes?

Esto significa que la mayoría de esos jefes, en realidad, necesitan personas que se entiendan bien con el Excel, el PowerPoint, la aplicación de turno que tenga la empresa o hagan llamadas y manden correos.

Si tienes un jefe (o jefa) realmente estupendo, vas a ir mucho más allá. Pero eso sí, tendrás que estar a la altura.

Los malos jefes preguntan ¿Qué hacemos ahora? en modo reproche

Hablamos del que deja siempre caer que, de haberle hecho caso, las cosas irían mejor. Pero claro, el problema es que “nadie le hace caso”.

Nuestro jefe estupendo sabe qué es un equipo bien liderado. Considera que las ideas deben ser compartidas para resolver problemas y obstáculos que se puedan presentar al grupo. Peor es no confrontarlos entre distintas voluntades y opiniones, que luego ya haré yo de mi capa un sayo. Con eso, efectivamente, será difícil que le hagan caso más allá de la orden inmediata.

Por otro lado, el buen jefe no caerá en la trampa de decir una frase tan de moda, que aparenta pragmatismo y esconde un egoísmo inmenso:

No me vengas con problemas: tráeme soluciones.

Un mal jefe usará esta frase como sinónimo de “deja de quejarte y haz tu trabajo”. Con ello no sólo haciendo sentir al empleado como poco valorado, sino también aumentando las posibilidades de que esa persona se quede bloqueada ante un nuevo dilema. Porque, desgraciadamente, va a tener que acudir al despacho de nuevo. Las soluciones se construyen en equipo, no viene nadie con la varita mágica.

 Un jefe decididamente mediocre te dará un 1% de aciertos

Este es uno de los tópicos que siempre se encuentran en la literatura del liderazgo. El mal directivo es el que se enfoca en tus errores, siempre evidencia tus fallos, bla bla bla…

Pero en la realidad, como siempre, no es todo blanco o negro. Es mucho más frecuente esa persona que, para no caer en la evidencia de que, efectivamente, no te valora, te concede una mínima parte de acierto para que no caigas en el desánimo.

Aunque pueda parecer que esto es mezquino, suele ser más propio de personas más bien centradas en su propia promoción. Y eso mantiene a raya la posibilidad de que el empleado crezca por sus propios medios.

Allí donde los buenos jefes se aseguran de hacer las observaciones pertinentes cuando es necesario, al tiempo que valoran el trabajo bien hecho, los malos jefes traspasan de inmediato sus percepciones -casi siempre negativas- e incluso lo hacen con un toque de maldad: “todo el mundo piensa lo mismo sobre ti”

Un jefe estupendo delega ¡Y no lo hace siempre en los mismos!

Es importante que todo jefe aprenda a delegar. Ahora bien, esto, que parece de manual de 1º de management, muchas veces se suele traducir en delegar siempre en el mismo “afortunado”.

Cuando estamos en una organización con una fuerte jerarquía esta suele ser la excusa para delegar siempre en la misma posición, pero nuestro buen jefe delega con una ecuanimidad envidiable, y con cierto riesgo (controlado, no se trata de poner en las manos de alguien un colt 45 cargado).

Porque jamás sabré el potencial que tiene una persona si no le delego algo que sé que no sabe hacer en un 100%. Si esto no sucede nunca, tienes una señal de que la dirección no confía en tus posibilidades.

En este tema, como en la vida, hay una amplia gama de grises. Hay jefes fantásticos aún con grandes taras u otros espantosos a pesar de sus buenas intenciones. Por eso es necesario identificar si a un jefe le cuesta liderar, pero le interesa cambiar, o no le interesa en lo absoluto.

Tal como dice John Maxwell: “Sin importar cuáles sean nuestras circunstancias, nuestra mayor limitación no es el líder encima de nosotros, sino el espíritu dentro de nosotros”

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Fundador y Ceo de Human Resources Leadership , el primer grupo Top de networking en recursos humanos de alto rendimiento orientados al liderazgo 3.0 , creado para producir sinergia real entre profesionales de todas las áreas con miles de miembros en todo el mundo y creador de la web liderandotalento.com .Actualmente HR Recruitment Manager de ACF Spain ha sido Responsable de Formación en Garben y Director de Desarrollo de negocio en Grupo San Román, habiendo sido freelance internacional en EE.UU durante dos años y Responsable de RR.HH del grupo Eninter Director de publicación de "Human Resources Leadership" (Vivelibro, 2013). Co-Author "LinkedIn 400 millions: Monetize in the economic graph",(Amazon,2015) y Colaborador de la revista Management. Consultor Top Linkedin Leadership, reconocido como uno de los mejores comunicadores en su área llevando el management de capital humano a un nuevo nivel de Leadership basado en entender qué nos convierte en referencia y cómo podemos hacer líderes a los que nos rodean, generando motivación a través de metas 3.0 Con estas referencias ha participado en foros como expo-learning e instituciones como la Universidad Europea de Madrid, Universidad Autónoma de Barcelona, Instituto Hartley House (EE.UU) y medios como Cadena Ser, Cope, RNE, siendo el autor del Podcast "La vida de la Empresa en Directo" con más de 13.000 oyentes