Tú marca está amenazada, actúa!!!

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Partamos de una realidad, el problema principal de la mayoría de las marcas no es por cuestiones “técnicas”, es porque han perdido su poder de seducción y han dejado de enamorar a sus consumidores. El problema es que muchos directivos se han asentado en la comodidad de la relación -como un marido o esposa aburridos de sí mismos- y han olvidado que la Magia se debe mantener, lo que requiere empatizar con los clientes y tener el arrojo y la audacia de romper paradigmas que eviten poner a su marca en riesgo.

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A continuación, enumero algunas amenazas que todo directivo debe tener en mente para contrarrestarlas si no quiere ver su marca en grave riesgo.

  • Pérdida de confianza. Cuando las marcas muestran una falta de ética, ya sea a través de lo que hacen o lo que deciden no hacer, los consumidores deciden “castigarlas” al menos por un tiempo. ¿Ejemplos?, es de mala educación señalar, pero creo que, a todos, lamentablemente, se nos ocurren varias marcas en este caso.

La confianza gira en torno a la conducta, hoy la pérdida de confianza va más allá de un mensaje engañoso, que es grave, sino sobre todo por la falta de ética, entendida esta en su más amplio sentido desde el compromiso ambiental hasta las relaciones laborales. Hoy ser una gran marca implica ser “impecable” -que no perfecta- y transparente, ya que la gente también valora mucho la autenticidad.

  • La falta de interés. El día que se deja de tener interés es el día que se empieza a dejar de ser atractivo. Si queremos ser relevantes, sexys y atractivos para nuestros consumidores debemos mostrar interés por ellos, lo que podemos traducir en escucharles, innovar, comunicarnos con ellos, atender sus “necesidades” cambiantes, lo que requiere ser social y humano, y de nuevo empatizar.
  • Perder el foco. En un mundo saturado de ideas, tecnología, experiencias usuario, información, casos de éxito, … panaceas que vienen y van, perderse en el juego de la marca puede ser más sencillo de lo que parece. Simplemente, se trata de seguir todas las tendencias que se proclaman, sin filtrar, para que tu marca acabe persiguiendo una quimera. Cada marca debe saber dónde apostar siendo consciente de quien es, lo que requiere aplicar el sentido común y ser muy disciplinado para no invertir en “modas”. En un negocio tan abstracto como la marca saber elegir – en un mundo tan saturado – distinguiendo lo efímero de lo relevante es la clave.Tú marca está amenazada, actúa!!!
  • La falta de Propósito. Aunque parezca mentira la mayoría de las marcas no tienen un propósito o cultura clara, simplemente se limitan a tratar de seguir el mercado, lo cual en definitiva se traduce como una falta de dirección. Tener un propósito claro, por irreal que este sea -pensemos en Amazon– es la primera regla para definir una dirección estratégica que nos lleve al éxito a largo plazo, ya que delimita por donde ir y por donde no; sencillo pero eficaz.
  • Ritmo incorrecto. Si la velocidad a la que funciona tu negocio o marca no está sincronizada con la velocidad del mercado o tus consumidores, lo más probable es que no llegues a la meta o que llegues tan pronto que no allá nadie allí. Normalmente nos preocupamos de no llegar tarde, pero la realidad empresarial nos ha enseñado que llegar demasiado pronto cuando el mercado no está preparado es igual o más perjudicial para una marca -¿Alguien se acuerda que marca fue la primera en lanzar un Tablet?, ¿Cuántas vendió?, pista no fue Apple. El reto por tanto es encontrar el ritmo que nos lleve siempre en cabeza, de tal modo que podamos ir aprendiendo en que momentos acelerar o en que momentos ser pacientes.
  • El no evolucionar. El mantener una velocidad adecuada implica el saber evolucionar a los cambios del mercado y de los consumidores. En función del sector donde trabajemos los cambios serán más rápidos o más lentos. Lo importante es estar alerta para no pasar a ser una víctima de una larga lista -Polaroid, Kodak, Blockbuster, Nokia …– de marcas líderes que no supieron actuar ante una nueva realidad, porque anticiparlo si lo hicieron.
  • Ausencia de Insights. La mayoría de las marcas viven o mueren en función de su capacidad para leer y traducir las necesidades y deseos de sus consumidores en propuestas asociadas a ellas. La realidad es que vivimos en un mundo donde existe mucha información y también una enorme capacidad para interpretarla en términos humanos. El exceso de confianza en los datos duros hace que muchas marcas acaben perdiendo la conexión con su realidad; nada más revelador que preguntar directamente de manera humana e informal a un consumidor para conocer la salud de nuestra marca. La falta de comprensión de los datos hace que al final se acaben generando marcas impersonales, incluso arrogantes, salidas de un “laboratorio”.
  • Gasto en marketing mal enfocado. La presión sobre los responsables de marketing por ser eficientes y eficaces en el gasto va en aumento, algo que en términos generales sería bienvenido si no fuera porque en muchos casos se traduce en una presión a sus proveedores para ofrecer más por menos dinero, ¿pérdida de eficacia? En otros casos, demasiados, se han agregado más agencias y consultores a su carrito de la compra en un intento por diversificar asesoramiento y comparar ideas, lo que en muchos casos más que clarificar escenarios ha venido a volverlos más complejos.
  • La falta de Estética. El mal gusto puede acabar matando a tu marca. La realidad es que en muchos casos las marcas en términos de sus identidades de marcas y sistemas visuales no han sabido evolucionar al ritmo de la sociedad o el negocio, es decir, que han olvidado la importancia de las primeras impresiones y de adaptarse a una sociedad cada día más visual. Asimismo, las experiencias cada vez están más asociadas al diseño y a elementos estéticos, como elementos que reflejan a la actualidad, sofisticación, simplicidad… en definitiva la cultura y el espíritu de la marca.
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Defensor del branding como fórmula alquímica de antropología, consultoría de negocio, finanzas, psicología y arte que se traduce en la creación de valor. Amante de las grandes historias, la estrategia de negocio y la innovación como inspiradores de marcas poderosas. Ha contribuido al crecimiento de compañías en diferentes países, industrias y roles. Durante su carrera, ha ayudado a desarrollar estrategias para más de 100 marcas en más de 20 países trabajando en consultoría y puestos de dirección de diferentes sectores (financiero, entretenimiento, tecnología y, servicios de marketing y comunicación). Licenciado en C.C. Económicas y Empresariales por la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), Executive MBA por el Instituto de Empresa (IE) y PDG por IESE Business School. Así misma pose un Diploma en Marketing Management por London School of Economics & Political Science (LSE), Journalist Certificate por New York University (NYU) e Innovation and Entrepreneurship Certificate por Stanford University. Entre otros durante los últimos años ha trabajado con: BBVA, Nissan, Renault, Naturgy, Telmex, Danone, Televisa, KPMG, Kola Real, Hyundai, Ultrafemme, Tiffanys, Mercasid, Univision, ICA, Grupo Expansión, FEMSA, Arca Continental and Telefónica. Actualmente es Socio en España y Latam distintas sociedades donde lidera estrategias corporativas y de branding, políticas de inversión, finanzas, alianzas y marketing.