El profesional de recursos humanos ejerce un papel fundamental en un entorno donde actualmente se deben tomar decisiones en contextos nuevos, gestionar el cambio y ayudar a las organizaciones a adaptarse a una nueva complejidad.
Según glocalthinking, la revolución industrial en la que estamos inmersos ha provocado una transformación en la manera de interactuar con el mundo, en el funcionamiento de las organizaciones y en la gestión del capital humano.
En la gestión de personas se han incorporado múltiples innovaciones con respecto al entorno que rodea a los nuevos profesionales, como son el big data, los entornos colaborativos o el cloud. En este ámbito, el profesional de Recursos Humanos debe conocer bien todo lo que acontece en el mundo digital y desenvolverse en los escenarios que se plantean.
Pero no basta con que estos profesionales se mantengan al día de las novedades, ya que tienen que convertirse en líderes pioneros e innovadores, es decir, «líderes estratégicos en un mundo tecnológico y digital», con una visión de futuro y un enfoque humano.
Por ello, su papel se hace indispensable en 3 perspectivas, como son la toma de decisiones estratégicas que no pueden asumir las máquinas, tener en cuenta la falta de legislación debido al desfase entre el mundo analógico y digital, y la complejidad local y regional de un liderazgo comprensible e integrador.
Los profesionales de recursos humanos deben saber cómo adaptar la tecnologías a las necesidades de la organización, de manera que puedan cumplir con una serie de requisitos, como el seguimiento de un empleado.
Además las necesidades locales también son clave para el liderazgo, como el cumplimiento de las normativas de cada país, ya que cada uno tiene una legislación distinta con respecto a la privacidad y seguridad. Por tanto es importante conocer las características de los lugares donde las organizaciones van a alojar los datos de los empleados, o bien localizar sus servidores.
Aunque vivamos en plena revolución tecnológica, esto no delimita que el curso analógico prosiga, por lo que sigue siendo igual de importante la gestión del riesgo y la toma de decisiones. Hacer un balance de las ventajas y los riesgos, teniendo en cuenta nuevos factores y matices, que por ahora las máquinas no son capaces de distinguir.
Para su correcta puesta en marcha estos líderes de recursos humanos deberán contar con un equipo de expertos en análisis, legislación, datos, y otras disciplinas clave para una buena gestión estratégica.
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