Durante los primeros pasos de vida de una start up, en las primeras rondas de financiación ante Business Angels o Capital Riesgo, uno de los valores que se suelen tener muy en cuenta para apoyar e invertir es el modo en que la startup tiene prevista su internacionalización.
Hoy en día, la globalización, los medios de transporte y la tecnología hace que una empresa nazca sin fronteras. Así pues, no se trata de constituir una empresa que primero crezca en tu entorno local y luego pueda internacionalizarse, sino que, en muchas ocasiones, es posible tener esa vocación desde el primer momento o, por lo menos, tenerlo estudiado y previsto para, ante una situación favorable, poder reaccionar en el acto.
Esta planificación puede ser de gran trascendencia a la hora de levantar más o menos capital y de que entre uno u otro tipo de socio financiero.
Un buen estudio de internacionalización, tanto para las startups como para las empresas tradicionales y que piensan en su crecimiento a través de la globalización, pasa por tener en cuenta ciertas variables y tener una estrategia pensada.
Comunicación
Las tecnologías propician que el producto o servicio de una empresa pueda ser conocido por cualquier consumidor alrededor del mundo. Así pues, una estrategia de comunicación basada en web, redes sociales, distintos idiomas… es necesaria. Esto es evidente hoy en día, pero lo más trascendente quizás sea la capacidad para personalizar de manera distinta para cada cultura. Así hay dos factores clave en esta estrategia de comunicación: el comunnity management en relación al modo de relacionarse con las distintas culturas, además del tipo de producto adaptado que vamos a ofrecer y la capacidad técnica de replicar para cada país al menor coste posible y máximo rapidez, las webs, redes sociales y contenidos.
Logística
Por sí sola daría para redactar libros. Trataremos de sintetizar.
Hay varios modos de enfocar la logística desde el punto de vista internacional, cada empresa debe tomar sus decisiones en función de su tipo de producto o servicio. La logística supone una auténtica barrera de entrada, y tenerla resuelta implica una ventaja competitiva.
La logística condiciona el tipo de crecimiento internacional de la empresa, hasta el punto de decidir si se toman socios locales, o de si se pasa el knowhow a un franquiciado o si vender tus productos a otras empresas y estas al consumidor (te conviertes en proveedor y tu marca se ve en otras tiendas, no en la tuya) o, finalmente, si se cree uno capaz de tener un crecimiento orgánico con filiales propias.
En función de estas decisiones y estrategias, se pueden optar por varios modos de estructura logística:
– En función de tu producto y de la trazabilidad que demande el consumidor, estás en manos de terceros. Esto es un riesgo que debes tener bajo control.
– Implementar tu propia estructura logística. En función de tu tipo de producto/servicio, puede ser inevitable. Por un lado te dará ventaja sobre tus competidores y una mejor comunicación con el consumidor, pero por otro lado la inversión en logística necesita de activos, protocolos y tecnologías complejas y caras.
– Entre ambas posibilidades, están otras intermedias: subcontratar la logística hasta que puedas invertir en la tuya propia. O buscar un partner logístico en cada país.
Estos tipos de logísticas (propia o subcontratada), el tipo de producto o servicio que ofrece la empresa y si haces un crecimiento orgánico, por franquicias, por venta a terceros o por socios locales, llevan a tomar otra gran decisión: dónde colocar tus centros de producción y de stocks.
Si inviertes en tu propia logística, corres el riesgo de sobredimensionarla, lo cual puede ser puede ser una ventaja competitiva si usas tu capacidad ociosa para que otras empresas vendan a través de ti. En esta estrategia de inversión en logística, es aconsejable que no se desestabilice el resto de la empresa traspasando recursos.
Regulación y aspectos legales
Influye sobre la logística, por lo que hay que estudiar qué tipo de aranceles y cuarentenas debe pasar tu producto. Hasta el punto que puede condicionar si tu fabricación o tus stocks deben ser ubicados en aquel país.
Se debe tener en cuenta el grado de protección de los productos locales sobre los extranjeros. De tal modo que también puede ocurrir que condicione que debas abrir franquicias o debas tener un socio local, no pudiendo en ocasiones tener un crecimiento por tus propias filiales.
Estudiar las patentes que pueda haber similares a tu producto o si puede ser replicado con más o menos permisividad. Incluso, puede darse el caso que tu producto sea legal en unos países mientras que en otros esté prohibido.
Financiación y tipo de cambio
La empresa conseguirá financiación dependiendo de la experiencia del socio financiero, si este es local o extranjero y de rebajar al máximo los niveles de incertidumbre y rapidez de las operaciones.
En función de la cultura y tradición del país al que te dirijas, un socio local puede reducir gastos y riesgos. Así mismo puede asegurar el crédito y la liquidez.
En otras zonas geográficas más occidentalizadas quizás pueda hacer innecesario un socio local.
El tipo de cambio tiene influencia en dos aspectos: en el financiero y en el logístico.
Saber en qué moneda se hacen las transacciones, en qué momento pasa el producto a ser responsabilidad del consumidor suponen costes logísticos que han de ser considerados.
En cuanto a los costes financieros se tratará de controlar si hay o no doble imposición, o conocer el coste de repatriar el beneficio. De este modo, en el plan de internacionalización de la empresa se pueden considerar decisiones como independizar una parte de la empresa, renunciar a repatriar los beneficios e invertirlos allí donde se han generado…
En todo caso, el tipo de cambio debe estar asegurado frente a fluctuaciones excesivas, que a veces pueden jugar en nuestro favor, pero igualmente puede darse la circunstancia inversa.
Estabilidad política
Nos procuraremos un marco de estabilidad siempre que sea posible. Esta estabilidad tiene que ver con los marcos legales en los que se desarrolla nuestro producto, las contrataciones, las asociaciones que se constituyen…
Pero también es necesario el nivel de desarrollo de la ciudadanía de aquel mercado, si se trata de un mercado emergente o está maduro.
Los recursos humanos
Expatriar directivos tiene la ventaja de un mayor control y de garantizar una cultura corporativa en la empresa, pero no garantiza el mejor acceso a los mercados, la logística, la financiación y las relaciones institucionales. Cada empresa evaluará la justa medida en que traspase poder al socio local o aumente sus gastos en expatriados.
Una vez que hemos tomado la decisión de internacionalizarnos
Incluso antes de llegar a nuestro mercado internacional objetivo, pese a tenerlo todo bien planificado, una manera de minimizar aún más los riesgos es lanzar un MVP (mínimo producto viable por sus siglas en inglés) y desarrollar versiones beta de canales de comunicación on-line. Así se puede chequear el impacto inicial y evaluar la aceptación de tus productos y servicios en el nuevo mercado.
Cuando tu empresa ha llegado a un mercado internacional deberá sacar ventajas de todas estas consideraciones que ha habido al diseñar el plan de expansión en lo referente a posicionar la marca mediante la comunicación, aprovechar la estructura logística que hayamos implementado…
Pero lo más importante será: cultivar las relaciones locales con instituciones y partners. Y ayudar a nuestro socio local cuando lo tengamos, siendo flexibles, apoyando en la formación y haciendo un seguimiento.
El mercado actual hiperconectado hace que los consumidores tengan acceso a cualquier producto del mundo así que las empresas deben estar preparadas para internacionalizarse.