Aunque de momento cuenta con un surtido limitado de 50 productos de marca de fabricante, parece que finalmente la llegada de Amazon Fresh a Reino Unido se hará realidad el próximo mes de febrero, encontrándose la compañía haciendo pruebas en Birmingham para perfeccionar el servicio.
El pure player norteamericano quiere que el servicio pueda ofrecer un servicio de entregas en una hora, en el que los compradores dispondrán de una gran multitud de opciones para comprar y recibir los pedidos. Para ello es necesario pertenecer a Amazon Prime mediante una suscripción de 79 libras al año, siendo el coste parecido al resto de los Delivery Pass que ofrecen los supermercados británicos.
Uno de los puntos fuertes de Amazon es el precio de los artículos, ya que según un estudio de Branview, la firma resulta ser de las más baratas en relación a otras marcas de supermercados ingleses, como son Tesco, Morrisons o Sainsbury’s, entre otras cadenas de distribución analizadas.
En relación al impacto que pueda tener la entrada de Amazon en el mercado de los supermercados online, lo cierto es que la multinacional cuenta con una capacidad financiera para apoyar esta iniciativa durante un tiempo indeterminado. Además la madurez del mercado podría facilitarle el servicio con los ya clientes de Amazon Prime.