En España, los supermercados muestran una notable resistencia frente a la caída de las ventas en volumen debido a la inflación, al tiempo que experimentan un crecimiento significativo en términos de facturación.
Según el informe anual de McKinsey sobre el retail, mientras que las ventas en volumen cayeron solo un 0,4% en España, Francia registró una caída del 3,1%, los Países Bajos del 2,3%, Alemania del 1,9% y el Reino Unido del 1,5%.
Los supermercados españoles lideran el crecimiento en términos de facturación, con ingresos totales de 91.000 millones de euros en 2023, un aumento del 10,1% respecto al año anterior, impulsado por el incremento de los precios. Esta tendencia contrasta con otros países europeos, donde el crecimiento en valor fue del 9,2% en el Reino Unido, del 8,8% en Francia, del 7,6% en Alemania y del 7,1% en los Países Bajos.
María Miralles, socia de McKinsey en España, señala que la inflación fue la tendencia dominante en 2023 en Europa, lo que llevó a los consumidores a ajustar sus gastos. A pesar de esto, España destacó por su menor ajuste en el consumo. Aunque las ventas reales ajustadas a la inflación disminuyeron en España, fueron menos pronunciadas que en otros países europeos.
En este contexto, las tiendas de descuento experimentaron un crecimiento más pronunciado en comparación con otros formatos, lo que resultó en un aumento de su cuota de mercado. Los supermercados especializados en descuentos vieron un crecimiento del 16,9%, seguidos por los hipermercados con un 14,3% y los supermercados con un 13,5%.
En cuanto al eCommerce en España, los ingresos en línea aumentaron un 10,1%, manteniendo una cuota de mercado del 2,6%. Aunque hubo un aumento del 1% en la frecuencia de las compras, este incremento fue menor que en la mayoría de los países vecinos europeos, a pesar de la fuerte subida de los precios.
En definitiva, aunque persiste la incertidumbre macroeconómica, se observan los primeros signos de recuperación. Aunque los CEOs de las cadenas de supermercados aún enfrentan presiones sobre márgenes, costes y precios, hay un cambio de enfoque hacia productos de mayor valor añadido o innovaciones por parte de los consumidores.
Fuente: Eleconomista.es
