Existe desde hace unos años una fiebre por crear apps para móvil de cualquier marca o producto, casi para cualquier acción. Pero, ¿es realmente necesaria para el negocio?
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Cómo utilizar una #app propia para la #fidelización ¿Estrategia ganadora? Clic para tuitear
Es una opción que responde al uso creciente de los smartphones por la mayoría de la población. Pero antes de decidirse a crear una aplicación móvil para el negocio o marca, debemos preguntarnos si tendrá valor añadido, si compensará a los clientes el hecho de descargarla y ocupar un espacio permanente en su móvil. En este caso, hace falta poner pros y contras en una balanza y tener en cuenta que unas pocas apps se llevan un porcentaje bastante importante de las descargas.
En España hay 27,7 millones de usuarios activos de apps que tienen instaladas de media unas 17,8 aplicaciones en su smartphone, y unas 11,4 en su tablet, según el Informe mobile en España y en el Mundo 2017 de Ditrendia. De estas apps escogidas por los usuarios, de media los españoles al final solo utilizan 9 en su smartphone y 4 en su tablet. Cada mes el usuario móvil se suele descargar unas 2 apps nuevas de promedio, con lo que se entrevé que muchas apps son descargadas, pero al no utilizarse, son descartadas y desinstaladas. En este contexto debemos preguntarnos: ¿Tiene la app de mi marca garantías de éxito?
Crear tu propia app
Las apps más descargadas son las de comunicaciones y redes sociales como Whatsapp, Messenger o Instagram. También las de compras y juegos. Por poner un ejemplo, 10 apps copan el 59% de las descargas de los milennials, con lo que el resto de apps se reparten sólo el 41% restante de las descargas. Son datos de un análisi de webdefamily basado en estudios de Comscore y otras fuentes, e indican que los usuarios de dispositivos móviles destinan casi el 100% de su tiempo a 3 apps, y cerca de la mitad del tiempo a utilizar solo una, la más apreciada por el usuario. Por eso, al diseñar una app es muy importante dirigirla a consumidores y momentos específicos, como ya indica esta fuente, porque la competencia es muy alta.
“Al diseñar una app es muy importante dirigirla a consumidores y momentos específicos”
Hay apps cuyo éxito ha sido aclaparador y todo el mundo se las descarga al tener un móvil. El tipo de apps con tendencia al alza de utilización son las apps sociales y de mensajería (349%), las de finanzas y negocios (43%) y las de compras (31%) y deportes (25%). Si nuestra app va más enfocada a ofrecer promociones, descuentos y otras acciones de fidelización, puede que una app descargable no sea lo más óptimo. Sobretodo si el uso de la app no será diario, su instalación puede carecer de sentido.
App para fidelizar clientes
Apps que dan puntos, regalos o descuentos cuando compras algo en la farmacia o cuando consumes en una cadena de restaurantes. Es una acción promocional muy habitual últimamente, pero que puede abrumar al cliente en vez de acercarnos a él, como provocó el boom de las tarjetas de fidelización. Los clientes se aburrieron de carretear tarjetas para obtener descuentos, así como ahora se pueden cansar de tener la capacidad de su móvil secuestrada por apps que no utiliza asíduamente.
Cuando estamos configurando un programa de fidelización y surge la idea de crear una aplicación para gestionar la relación con estos clientes y sus recompensas, debemos plantearnos si al usuario le valdrá la pena tener siempre instalada esa aplicación. Muchos programas de fidelización obligan a descargar la app desde App Store o Google Play y registrarse con contraseña para poder conseguir puntos en cada visita o compra. La mayoría de estas apps permiten otras acciones como localizar los establecimientos de la franquicia, marca o club más cercanos, gestionar reservas o consultar las novedades. Pero estas acciones son fáciles desde otras apps como TripAdvisor o Googlemaps, que nos sirven para consultas diarias.
Así que la idea base está clara: poder generar un programa de fidelización de clientes en el que se pueda acceder vía móvil. De esta forma podemos distinguir a ese cliente, identificarlo con un nombre, unos apellidos, un email, quizá hasta un teléfono, y ubicarlo geográficamente, con lo que nuestro equipo de marketing podrá generar acciones de promoción más personalizadas y eficaces. Y por lo tanto, contribuir a generar clientes vips que son fieles a la marca y que vuelven periódicamente a los establecimientos para generar más compras. ¿Hay otra forma de utilizar una app para ello, sin pedir al cliente que se la instale?
Sí, existe esta posibilidad. Se trata de generar apps de promoción e instalarlas online. Hay softwares de promoción y fidelización de clientes online, como Easypromos, que permite personalizar una app e incrustarla mediante widget en una web. No sólo cumple con un diseño totalmente mobile friendly, sino que es responsive y se adapta a cualquier tipo de pantalla.
Lo mismo se puede hacer con una url personalizada, por ejemplo, si queremos crear una web propia para la promoción del club de fidelización. O si queremos dirigir a los beneficiarios de las promociones hacia nuestra página de Facebook; también se puede instalar como app dentro de una página de marca de esta red social, o compartir la url de la app en una publicación. La experiencia del usuario que queremos fidelizar será vía móvil, será óptima, y además le ahorramos el engorro de la instalación. No es una solución que sirva para todas las acciones y para todas las marcas, pero sí puede serlo para una gran mayoría.
