Steve Treagust, Director para la Industria de Finanzas, HCM y Estrategia, a nivel global, en IFS.
Durante el evento IDC Directions 2017, en Boston, multitud de empresas, que están llevando a cabo la transformación digital, han puesto de manifiesto todo su potencial. Sin embargo, la pregunta que debemos hacernos es cómo podemos implantar esta transformación digital, en lugar de si debemos hacerlo; y por eso, es necesaria una “estrategia conectada”, facilitada por un conjunto de soluciones software e impulsada por la innovación empresarial y el liderazgo.
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La transformación digital radica en la incorporación de medios digitales con el fin de fomentar la ambición, competencia y dirección del negocio. Ser digital significa permitir la conexión y traducción en las plataformas digitales y dispositivos inteligentes, de infinidad de datos recopilados y analizados de forma más inteligente, para sacar el máximo partido a nuestro negocio.
La economía digital
El hecho de que la economía digital está en auge es globalmente sabido. Según una investigación del Instituto Tecnológico de Massachusetts, las compañías adaptadas al mundo digital son un 26% más rentables y dan un 9% más de beneficios.
La Comisión Europea lo define como el motor más importante de innovación, competitividad y crecimiento a nivel mundial. Y el gobierno británico, por ejemplo, se ha basado en estos datos para realizar una importante inversión fiscal.
Con la aparición de nuevas tecnologías como Internet de las Cosas (IoT), Big Data, Blockchain, drones e Inteligencia Artificial (IA), el potencial para aquellas empresas capaces de experimentar una verdadera trasformación digital se está incrementando exponencialmente.
Sin embargo, para minimizar riesgos y maximizar las ganancias, necesitan estar alineadas con ciertos objetivos estratégicos y para eso es necesaria una estrategia conectada.
La necesidad de una estrategia conectada
Entre el 60% y el 80% de los negocios fracasan al poner en marcha su estrategia, esto es un hecho que ha durado décadas. Muy pocas empresas han logrado pertenecer al grupo de élite que ha tenido éxito en la definición y ejecución de su estrategia.
Uno de los factores principales para llegar a ser una empresa de éxito es la capacidad de los líderes empresariales para conectar sus estrategias, tanto con los individuos, como con los datos de origen y con la gestión, a todos los niveles de la empresa.
La incorporación de una estrategia conectada, dentro del proceso de transformación digital, permite enlazar cada elemento de la visión estratégica, con los objetivos, los empleados y los datos de origen.
Asimismo da lugar a un mecanismo orgánico que rentabiliza al máximo la tecnología, las necesidades y expectativas de los clientes y el liderazgo empresarial, y permite un crecimiento de negocio sostenible.
Aquí es dónde las soluciones de software juegan un papel fundamental, aportando la habilidad de conectar las estrategias, con las operaciones y los datos, y aprovechando el potencial de las nuevas tecnologías en la gestión del rendimiento corporativo.
Gestión del rendimiento corporativo
La creación de un mecanismo estratégico, que proporcione y esté en sintonía con una estrategia conectada, requiere un liderazgo y agilidad fuertes en la gestión del rendimiento corporativo.
Una vez más, la solución de software acertada puede facilitar la tarea, distribuyendo la información necesaria, de forma segura y en tiempo real, a los responsables de la toma de decisiones.
Innova antes de que innoven por tí
No hay duda sobre el potencial de crecimiento que genera la economía digital. Para tener una política de transformación digital hay que ser innovador y disponer de soluciones software que ayuden a sacar partido a estas tecnologías y proporcionen ventajas estratégicas corporativas que marquen la diferencia.
