El crecimiento acelerado de plataformas de ultra fast fashion como Shein y Temu está provocando un giro estratégico en el sector logístico español. Este fenómeno, impulsado por el aumento del comercio electrónico, obliga a revisar modelos de distribución, infraestructuras y capacidades operativas en un país donde la disponibilidad de suelo prime es cada vez más escasa.
De acuerdo con Prologis, empresa de promoción logística en Europa, la demanda de espacio se disparará hasta 4 millones de metros cuadrados adicionales antes de 2030. Esta transformación no solo implica una cuestión de metros cuadrados, sino de adaptación a nuevas dinámicas de consumo y distribución, donde el canal online exige hasta tres veces más espacio logístico que la venta tradicional.
Un mapa logístico en transformación
El auge del ecommerce, que se prevé alcance una cuota del 14,7% en España en 2030, está generando una presión sin precedentes sobre el mercado logístico. Según los cálculos de Prologis, por cada punto porcentual de incremento en la penetración digital se requieren entre 1,4 y 1,9 millones de metros cuadrados de nueva superficie logística.
La principal barrera, sin embargo, no es financiera. El mayor desafío radica en la escasez de suelo disponible en ubicaciones estratégicas. En zonas como Barcelona, la disponibilidad logística es prácticamente nula, mientras que Madrid mantiene una media del 11%, con contrastes notables entre áreas como el Corredor del Henares y el sur de la región.
Este contexto de limitación física y volatilidad geopolítica está llevando a muchas compañías a adoptar estrategias de wait and see, ralentizando inversiones hasta que haya mayor claridad sobre aranceles, normas de importación y costes de construcción.
Nuevas estrategias de distribución y hubs portuarios
El posible fin de la exención arancelaria «minimis», que actualmente permite importar sin tasas mercancías de menos de 150 euros, podría alterar de forma significativa los flujos logísticos. En ese escenario, se prevé un mayor protagonismo de los puertos de Valencia, Sagunto y Algeciras, potenciando su papel como nodos de entrada y distribución para el comercio electrónico asiático.
La tendencia también anticipa un modelo de hubs logísticos descentralizados próximos a infraestructuras ferroviarias y portuarias, que permitan absorber los picos de demanda y reducir tiempos de entrega, un aspecto crítico en el ecommerce actual.
Innovación y sostenibilidad en el sector Logística en España
Ante este nuevo escenario, operadores como Prologis están apostando por desarrollos personalizados, sostenibles y descarbonizados, priorizando proyectos bajo demanda para grandes clientes. Actualmente, un 34% del stock logístico de la compañía en España está vinculado al retail y comercio online, y las previsiones apuntan a que esta cifra seguirá creciendo.
El auge de Temu, Shein y otras plataformas no solo multiplica la facturación del ecommerce, sino que obliga a repensar las infraestructuras logísticas y los modelos de negocio asociados a la última milla. Una oportunidad estratégica para anticipar modelos de distribución más flexibles, eficientes y adaptados a la inmediatez que exige el consumidor digital.
Fuente: El Economista