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Amazon avanza en su plan de traer al presente las tiendas del futuro. Junto a las tiendas sin cajas registradoras y sin casi empleados, las conocidas como Amazon Go, la compañía está apostando por implantar en cada vez más establecimientos el uso de los dispositivos Amazon One, que permite a los clientes pagar sus compras con la palma de la mano.

El funcionamiento es sencillo. Los compradores colocan la palma de la mano sobre el dispositivo de Amazon, el cual cuenta con una cámara de alta resolución y alta velocidad que escanea y cifra sus datos biométricos utilizando una serie de algoritmos. Se trata de un sistema similar a la configuración de Face ID para desbloquear los iPhone. Una vez registradas las arrugas y hasta las venas que hacen única a cada palma, el dispositivo es capaz de reconocer cada mano en cuestión de segundos, según la propia compañía y recoge Quartz.

El dispositivo de Amazon que permite pagar la compra con la palma de la mano cuenta con una cámara de alta resolución que escanea y cifra los datos biométricos Clic para tuitear

En teoría, esto evita que alguien pueda robar la identidad de un cliente para realizar pagos sin su consentimiento. Sin embargo, es posible crear moldes de látex que repliquen las características únicas de la palma de una mano -también de la cara o la retina- y Amazon no ha dado detalles sobre si el sistema protege al 100% los datos de sus clientes.

¿Afectará al pago en efectivo y con tarjeta?

Por otra parte, esta tecnología podría dejar obsoleto el pago en efectivo, con tarjeta e incluso con el móvil, al no ser necesario cargar con una cartera o un dispositivo para realizar una compra.

Cabe destacar que Amazon ha implantado este sistema en las tiendas físicas de Amazon Go y Amazon Books, así como en los supermercados Whole Foods de Seattle y en una de Austin, a la que pronto se unirán otros seis establecimientos en ese estado. También lo está utilizando en la primera tienda física de ropa del gigante del comercio minorista, conocida como Amazon Style. Ubicada en el centro comercial The Americana at Brand de Los Ángeles, la tienda de más de 9.000 metros cuadrados ofrece una experiencia única al cliente. A través de la aplicación que los consumidores se tienen que descargar previamente, pueden escanear la prenda que les haya gustado y solicitar el color y talla que desean para, posteriormente, recogerlo en un mostrador que estará equipado con Amazon One.

Fuente: El Economista