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En los últimos seis meses, Amazon ha multiplicado en más del doble su actividad aérea a través de Air Transport International (ATI), que dispone de 15 aviones de su flota actual.
Tan sólo esta Navidad, la compañía estadounidense prevé entregar 200 millones de paquetes en Estados Unidos, por lo que para solventar las dificultades logísticas cuenta con Amazon One, el avión N1997A que hace referencia al año en que el gigante del eCommerce se fundó.
@amazon despliega su arsenal logístico aéreo Clic para tuitear
Tal como señala un análisis de Financial Times, en el último trimestre del año pasado, Amazon invirtió 4.200 millones de dólares en su red de reparto, con la previsión de que la cifra aumente de cara a este año. De media, los vuelos de ATI para Amazon aumentaron de 8 a 19 diarios desde la semana pasada, tal como indican los datos de FlightAware.
Junto con este medio, que transporta los artículos entre almacenes, Amazon sigue contando con las principales compañías de transporte en Estados Unidos, lo que le convierte en un actor esencial para el segmento logístico del país norteamericano.
Pese a ello, los planes de Amazon por conseguir hitos en la entrega de paquetes pudieran verse truncados por las huelgas de pilotos. Ya el año pasado, una huelga en su filial Air Transport Services Group, que opera 14 aviones para la compañía, provocó la suspensión durante varios días de los vuelos previos al Cyber Monday.
Mejora en logística para el aumento de beneficios
En el último año, las pérdidas netas del gigante del eCommerce por los envíos alcanzaron los 6.400 millones de dólares, aumentando en mayor proporción que las ventas.
Entre el Black Friday y Navidad, Amazon repartirá cerca de 220 millones de paquetes, aumentando su volumen un 27% con respecto al 2015. Así lo afirma la consultora ShipMatrix, que añade que durante estas fiestas la compañía enviará siete millones de paquetes.
Con el aumento del comercio electrónico también lo hace el envío de paquetes, creciendo a doble dígito el volumen de entrega de paquetes en Estados Unidos. Se trata de una situación complicada para las empresas de transporte ya que, como explica Brandon Stanton, consultor en Transportation Impact, “estas empresas desconocen el volumen porque no tienen evidencias de los años anteriores. Nos estamos adaptando al cambio drástico en los hábitos de los consumidores”.
Frente a tales circunstancias, Amazon está invirtiendo en busca del abaratamiento de su red logística, que con el tiempo llegará a ser más fiable que la de sus competidores. La previsión para este ejercicio es que la firma consiga unas ganancias de 1.622 millones de dólares.