Mientras el mercado textil digital sufre por ampliar sus márgenes de beneficios, Boohoo ha conseguido mantener su rentabilidad ganando cuota de mercado a compañías como Asos
Boohoo adelanta a sus competidores en el #mercado textil digital #ecommerce Clic para tuitearTiempo de Lectura: 1 minuto
El sector textil se encuentra en un punto de inflexión: por un lado, las marcas tradicionales buscan reinventar sus modelos de negocio sin castigar los márgenes de rentabilidad para hacer frente al crecimiento de las compañías nativas digitales; mientras que las marcas nacidas online tratan de mejorar su sostenibilidad, castigada por las devoluciones.
En este escenario, hay una compañía que ha conseguido mantener su ritmo de crecimiento combinando todos los factores anteriores. Boohoo se ha ganado la atención de los inversores gracias a mantener su rentabilidad y márgenes en los últimos tres ejercicios.
Fundada en 2006 por Mahmud Kamani y Carol Kane, recientemente ha alcanzado una capitalización de 3.670 millones de euros en bolsa. El motivo son las positivas previsiones de ingresos para el año: un crecimiento de entre el 33% y 38% que le permitirán lograr los 1.100 millones de facturación.
Las claves de crecimiento de Boohoo
Por su parte, Asos parece seguir el camino contrario. La compañía de moda ha modificado a la baja sus previsiones de crecimiento hasta en tres ocasiones en los últimos diez meses y ha experimentado una reducción del 60% en su resultado neto debido a los costes que ha tenido que soportar en uno de sus almacenes en EE UU.
La credibilidad es una de las claves del crecimiento de Boohoo. La marca solo ha variado sus previsiones para mejorarlas. Además, un saludable margen bruto del 54,7%, frente al 49% de Asos, en su último ejercicio es uno de los factores que seduce a los inversores. A esto se suma una exitosa política de adquisiciones, ya que el grupo se ha hecho con marcas como PrettyLittleThing, Nasty Gal y Miss Pap, Karen Millen y Coast.
Boohoo cuenta con un modelo muy centralizado en Reino Unido, donde fabrican la mayor parte de sus prendas y desde donde distribuyen al resto del mundo. El único punto débil de la compañía se encuentra en el mercado internacional: hasta el 57% de sus ventas provienen del propio Reino Unido (frente al 32% que representa el mercado doméstico para Asos), aunque sus ventas en Europa han crecido un 231% en tres años.
