Los emprendedores y la estrategia emprendedora no siguen la misma pauta que los directivos y la estrategia en empresas consolidadas.
El mundo del emprendedurismo tiene sus propias formas de trabajo y no tienen por qué coincidir siempre con las del mundo de las empresas establecidas y, más o menos, estables.
Hay características que definen el emprendedurismo:
– Ingenio en cuanto a las ideas. Aporte de nuevas ideas en el negocio, bien en forma de producto, de proceso de transferencias, de la logística e incluso del modelo de negocio. Podemos decir que están más próximo a la innovación.
– Dinamismo en cuanto a la forma de llevar a cabo las ideas y planes derivados. El paso de una al otro, la puesta en marcha, siempre gana a la reflexión pausada. El enfoque de rapidez supera al de seguridad.
Es, por lo tanto, difícil aplicar métodos propios de las empresas estables y establecidas, con sus planes estratégicos, mecanismos de reflexión derivados de indicadores de seguimiento, del análisis de riesgos, etc.
¿Cómo llegar a una estrategia emprendedora que funcione y manteniendo las particularidades de los emprendedores?
Tradicionalmente se ha venido aplicando el mismo sistema que en las empresas consolidadas:
- Plan de Negocio.
- Plan Estratégico.
- Estudio de Mercado.
En la bibliografía se encuentran trabajos que analizan las pautas de los fundadores de empresas exitosas (emprendedores). Dichas pautas son:
- Los emprendedores eficaces descartan las ideas poco prometedoras tan pronto como pueden.
- Lo anterior lo hacen mediante el juicio y la reflexión y no acumulan montañas de datos.
- Evalúan con realismo su situación financiera, sus preferencias personales y las metas para empresa de riesgo.
- Para no perder ni tiempo ni dinero, los fundadores de las nuevas empresas minimizan también los recursos que dedican a investigar ideas.
- Los emprendedores de las empresas exitosas no requieren de todas las respuestas para actuar.
- No suelen separar el reflexionar del actuar. Se ponen en marcha e improvisa y tan pronto como surgen problemas buscan las soluciones.
De forma sintética:
- Evaluar las oportunidades rápidamente para descartar las empresas de riesgo poco prometedoras.
- Analizar las ideas parsimoniosamente. Centrarse en unos pocos aspectos importantes.
- Integrar la acción y el análisis. No esperar a tener todas las respuestas y, además, estar dispuestos a cambiar de rumbo.
Sin duda alguna es éste último aspecto (aunar acción y análisis) una de las características más repetidas pero, también, más complejas de hacer realidad. Veamos algunas características comunes en este enfoque:
- Acometer las tareas analíticas mediante etapas y no, necesariamente, resolver todos los problemas de una vez.
- Ser muy rápido en la resolución de problemas, de forma que apenas reconocido aquél ya se busca la solución y, además, hacerlo continuamente.
- Hacer imperceptible la línea divisoria entre investigación de mercados y la venta. Todas las acciones, incluso las de búsqueda de información, se convierten en acciones de venta.
- Gran seguridad en sí mismo para saber actuar incluso sobre la base de datos cuestionables y planes rudimentarios.