Louis Braille ideó su sistema de puntos en relieve hace casi dos cientos años, y aún hoy sigue perfectamente vigente, permitiendo a las personas ciegas leer y escribir de forma eficaz, o incluso adentrarse en la informática. ¿Por qué no en un smartwatch?
El primer #smartwatch con sistema #braille para ciegos es ya una realidad gracias a @dot_incorp Clic para tuitearTiempo de Lectura: 1 minuto
Desde que la compañía Dot se hiciera esta pregunta hace un par de años, con relieves dinámicos sobre la superficie, el producto ha madurado hasta encontrarnos con algo bastante más atractivo.
Los puntos en Dot se elevan de forma independiente para dar forma a la información en braille. A partir de ahí, podemos recibir cosas tan diferentes como notificaciones, mensajes, información meteorológica, y por supuesto, la hora.
Obviamente solo la podrá leer el usuario, y no el resto de gente que esté alrededor, como ocurriría con un asistente basado en voz.
A diferencia de los Smartwatch corrientes, este dispositivo hecho de aluminio tiene un display con 24 puntos mecanizados donde se muestra toda la información en el alfabeto de los puntos.
Además, está dividido en dos secciones táctiles para facilitar su uso mediante pulsaciones.
Se conecta al Smartphone por vía Bluetooth, y cuenta con los dispositivos de un reloj inteligente tradicional como giroscopio y acelerómetro. También servirá a su dueño para leer las notificaciones del navegador y saber que va por buen camino.
El dispositivo cuenta además con otras formas de interacción. Es el caso de tres botones en el lateral derecho que permiten funcionalidades adicionales, como respuestas programadas, o configuraciones.
Este Smartwatch no requiere de un gasto energético tan agresivo como el de una pantalla convencional así que su duración es mayor. Concretamente, utiliza una batería de litio de 400 mAh, suficiente para aguantar toda una semana sin necesidad de cargarlo.
La compañía ya ha comenzado a enviar el producto a las 140.000 personas que decidieron apoyar la idea en su plataforma de financiación.
El año que viene, si todo marcha como debiera, será una realidad de mercado para todo el mundo. ¿Su precio? Costará unos 280 euros al cambio, y vendrá en una caja con su cable USB y estación de carga inalámbrica.
