En Estados Unidos uno de cada dos trabajadores se sintió obligado a tomar una decisión difícil o simplemente dejar un empleo para alejarse de un mal jefe, según explica un estudio de Gallup realizado en abril de 2015.
El informe denominado ‘State of the American Manager: Analytics And Advice For Leaders’ explica que sistematicamente la gran mayoría de las organizaciones elige a gente equivocada para roles de gestión y liderazgo. Una decisión que luego pagan caro ya que consiguen poco compromiso por parte de los empleados y una rotación costosa, con la inevitable baja de la rentabilidad laboral en general.
Según Gallup, los rasgos que definen y distinguen a los mejores jefes son la visión innovadora del talento de la que disponen, además de motivar al equipo, lo que hace que los trabajadores quieran quedarse.
La conclusión que más destaca del informe es que son demasiadas las compañías que ponen en marcha una metodología equivocada a la hora de seleccionar a los directivos, puesto que basan sus decisiones de contratación en la experiencia pasa del empleado, volviéndose en contra en un 80% de los casos.
Jim Harter, jefe científico de Gallup, explica que “el rito de iniciación en la mayoría de las organizaciones, si se es bueno en el trabajo, sea cual sea la especialidad, y si se queda mucho tiempo, el paso siguiente es ser promovido a jefe».
El estudio explic que esta progresión debe ser rediseñada, brindando a los empleados más de una camino mediante el que obtener una recompensación y privilegio, ya que algunos empleados compiten en roles para los que no son adecuados.
Para llegar a ser un bien jefe, desde Gallup aseguran que debe existir una rara combinación de cinco talentos, que son motivar al empleados, superar obstáculos, crear una cultura definida de responsabilidades, construir relaciones de confianza, informar de la toma de decisiones y gestionar bien al equipo sin prejuicios.
Esta combinación de talento innato tan sólo la tienen 1 de cada 10 personas, siendo 2 de cada 10 aquellos que poseen alguno de los cinco talentos, y que por tanto pueden llegar a asesorar adecuadamente.
Según Harter, el uso de herramientas analíticas y predictivas ayuda en la contratación de personas más cualificadas, siendo muy superior el beneficio que conlleva, con un 70% de variación en el compromiso de los empleados.
En términos de resultados, aquellas compañías con empleados comprometidos y felices superan en resultados al resto, entre los que se incluyen factores como la innovación, rotación, ausentismo y productividad.
Asimismo otro descubrimiento impactante es que los empleados con jefas son de media un 6% más comprometidos que los que trabajan con un jefe hombre, siendo sólo 1 de cada 3 los que trabajan con una mujer líder. Esto se debe a que las mujeres inspiran altos niveles de compromiso y lealtad a los trabajadores del siglo XXI, además de alabar mejor los esfuerzos de sus trabajadores.
Para lograr un compromiso y mitigar las debilidades, desde Gallup consideran efectivo acentuar las conductas positivas para intencionadamente mitigar las debilidades.
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