Sin duda Apple es La Marca. Sin embargo, desde hace años por parte de los miopes del marketing y el branding, entre los que me incluyo, existe la discusión de si la marca esta perdiendo su fuerza y la fe de sus consumidores. Probablemente a principios de septiembre, concretamente el día 8, veremos cuanto nos estamos equivocando, quizás con alguna sorpresa que algunos ya se atreven a predecir, o simplemente seguiremos en nuestra visión alejada de la realidad. Como buenos miopes nos equivocamos, estamos hablando de la marca más valiosa del mundo y parece que lo va a seguir siendo por muchos años, pero si es cierto que en la Era Post-Jobs se ha venido poniendo en duda la capacidad de innovación y por tanto su Magia.
Si hablamos en términos puramente financieros parece que la marca no corre grandes riesgos, crecimiento constante en ventas, mercados de enorme potencial como China, gran capitalización bursátil…. Sin embargo, esto no da respuesta a la gran cuestión – ¿la magia se está desvaneciendo?. Sin duda, en la nueva Era la marca perdió un showman visionario convincente, que igualmente cautivaba a clientes como a inversores; también es cierto que el Mito se ha ido creando más tarde.
La realidad es que en los últimos años parece que la marca está mas centrada en incrementar los productos ya existentes o lanzar al mercado los que ya tenia en su pipeline de innovación (Apple Watch) que apostar por la innovación. Si pensamos en los últimos años, la única apuesta fuera de mejorar los productos estrella ya existentes – iPhone, iPad, MacBook Pro y MacBook Air – que le ha permitido crecer en cuotas de mercado, ha sido Apple Watch y ahora Apple Music. Sobre el primero, a pesar de las excelentes perspectivas y magnifica estrategia de marca y producto, aún tiene que demostrar sus bondades en términos de ventas y aceptación por parte del consumidores, más allá de los fanáticos o los que buscan la experiencia – Apple es mucho más que un producto, es cómo nos sentimos y cómo queremos que los demás nos vean. La cuestión es cuando verán la luz los productos herederos de una novela de Julio Verne, como por ejemplo el Apple Car, sobre el que tanto algunos divagan.
Si las especulaciones en torno al nuevo portfolio de productos de Apple es cierto, el futuro de la compañía será aun más brillante de lo que hoy lo es. Desde mi falta de visión, incluso a veces bipolaridad, estoy seguro que Apple Watch va a cambiar el comportamiento del consumidor, al igual que Apple Music, sin ser tan innovador, va ser un elemento más de cambio en la industria de la música y en el entorno del consumidor, como en su momento lo fue el iPod. Sin duda, Apple nunca nos va defraudar transmitiendo su idea de marca, en cualquier producto, a través del diseño, la comunicación optimista y poniendo al consumidor como protagonista de la experiencia que se deriva de la innovación.
Steve Jobs dijo – «La muerte es muy probablemente el mejor invento de la vida. Es el agente de cambio de la vida, aparta lo viejo para dar paso a lo nuevo”. Ese es básicamente, el reto y la estrategia que esta teniendo la compañía apostar por mantener aquellos productos relevantes, apartar los que ya perdieron su momento y apostar fuertemente por la innovación con nuevos productos, otra cuestión es que la ansiedad por ver el siguiente paso de una marca que ha significado tanto en términos de innovación como su impacto en nuestra vida diaria nos lleve a la miopía.
Apple se convirtió en mucho más que una empresa de tecnología, para pasar a ser la representación de un estilo de vida, el zenit de la aspiración y la innovación, cautivando la imaginación del mundo. Para mantenerse en esa posición que toda marca ambiciona, a pesar de la perdida del misterio por masificación, tiene que seguir desafiándonos a todos, siendo atrevida y ambiciosa manteniéndose fiel a “Think different”.