España se sitúa entre los cuatro países que menos previenen la falta da pagos de sus proveedores.
Más de la mitad de las #pymes españolas no establece medidas para protegerse de los #impagos Share on XTiempo de Lectura: 1 minuto
El 56% de las empresas españolas no aplica las medidas habituales para protegerse de los impagos. 109 días es el periodo de tiempo medio que tardan las compañías nacionales en entregar sus facturas pendientes de cobro a una compañía de recuperación de deuda.
En este sentido, tener las cuentas en orden, conseguir liquides y controlar las operaciones diarias son los principales desafíos a los que se enfrentan los autónomos, pymes y grandes empresas para mantener la estabilidad de sus negocios.
El Informe Europeo de Pagos, elaborado por Intrum, sitúa a España entre los cuatro países europeos en los que las empresas toman menos precauciones para prevenir la falta de pagos de sus clientes. A pesar de que el 51% de las compañías afirma conocer la Directiva Europea de Lucha contra la Morosidad, solo el 12% asegura acogerse al derecho de aplicar un recargo de 40 euros por retrasos en el pago de cliente B2B y del sector público.
¿Qué medidas pueden ayudar a protegerse frente a impagos?
De cara a frenar los impagos, el 42% de los negocios europeos recurre al pago por adelantado. Sin embargo, en el caso de las empresas españolas esta medida queda relegada al tercer puesto, ya que solo la aplica una de cada diez compañías.
La medida más común entre las empresas españolas es realizar un seguro de crédito, a lo que recurren el 19% de los negocios. La verificación crediticia, el pago por adelantado, las garantías bancarias y el factoring son otras de las acciones contra los impagos.
Los problemas financieros, el pago atrasado de manera intencionada o la ineficiencia administrativa son las principales razones alegadas a nivel paneuropeo para no recibir los pagos a tiempo.
Las consecuencias de no recibir los pagos a tiempo pueden convertirse en un factor de riesgo para las empresas, ya que pueden acarrear problemas de liquidez, pérdida de ingresos o amenazar la supervivencia del negocio. El estudio señala que el 18% de las empresas facilitan sus facturas pendientes de cobro a una empresa especializada en gestión de deuda una vez que ha pasado una media de 109 días desde su vencimiento.
En este sentido, el 51% de las compañías reciben peticiones para aplazar los pagos o ampliar el periodo y el 42% de ellas termina cediendo ante sus clientes y acepta aumentar el plazo.