Elearning: ¿cómo aprovechar de verdad la formación online?

Mónica Díaz-Ponte, Profesora de Postgrado de ESIC Business & Marketing School, con una experiencia laboral digital de más de 20 años y con una media de una sesión online semanal desde hace unos años, analiza las claves para aprovechar la formación online.

#Elearning: ¿cómo aprovechar de verdad la #formación #online? Clic para tuitear
ESIC

La relación profesor – alumno – profesor. Una historia de profesores novatos y alumnos mojigatos.

  • Elearning, formación online, formación a distancia, enseñanza online. ¿Cuáles son las diferencias?
  • El trabajo pre-work y post-work ¿Qué es y para qué sirve?
  • Hacer prácticas online y favorecer la interactuación
  • Algunos tips para el alumno y algunos otros para el profesor

¿Qué es lo que más me preguntan en medio de este “tsunami” que afecta a la formación de una materia tan frontal?

¿Es lo mismo impartir formación presencial que online? No.

¿Se obtienen los mismos resultados? Eso depende del profesor y del alumno. Como en la formación presencial.

Cuando era más novata y por lo tanto no tenía herramientas, cometí muchos errores:

  • No comprobar comprensión de la forma adecuada (no solo preguntar si han comprendido, también por ejemplo usar test rápidos para que ellos sean conscientes).
  • Una vez aprendido “lo de comprobar atención”, empezar a calcular mal la cantidad de información sin pensar que si se consigue participación y pruebas de comprensión, todo es más lento.
  • No usar la cámara aunque al proyectar una presentación. Es importante que haya una persona, aunque sea en un pequeño cuadrado.
  • ¡Y mil más!

Hoy, sin duda, diría que en la formación presencial se obtienen mejores resultados; es más, después de un buen entrenamiento, creo que se pueden obtener los mismos resultados o incluso mejores. Técnica, herramientas tecnológicas y personales, y actitud.

¿Qué es el elearning, la formación online, la enseñanza a distancia digital y otros términos?

Todos sabemos que el elearning o “electronic learning” (aprendizaje electrónico en su traducción literal), es la impartición de educación a distancia utilizando medios digitales, pero existen diferentes niveles de cercanía e interactuación con el alumno:

  • Enseñanza a distancia

El profesor “sube” e indica materiales que el alumno estudia. El alumno realiza distintos ejercicios, utiliza herramientas y puede preguntar en la plataforma, por email o incluso presencial. En un plazo de tiempo determinado el profesor responde.

La interactuación es muy limitada.

  • Formación con interactuación

El mismo caso que el anterior, pero se determinan las horas de disposición o “tutorías online” de cada profesor. En ese periodo el profesor puede añadir documentación o ejercicios, y durante ese tiempo los alumnos pueden preguntar por email, chat u otro sistema.

No hay explicaciones en vivo al grupo. 

La interactuación es limitada.

  • Formación Online, también llamada Enseñanza Virtual

Se utilizan todas las herramientas anteriores, pero además se realizan sesiones online con los alumnos, con imagen del profesor o con proyección de una presentación, ejemplos, casos, ejercicios, etc. Es lo que todo conocemos como “una clase”.

Los alumnos intervienen con chat, voz o vídeo en directo y resuelven sus dudas compartiéndolas con todo el grupo. El profesor resuelve los problemas en directo.

La interactuación es muy elevada.

En mi caso, tengo la suerte de impartir Formación Online: mis alumnos son responsables de su formación, pero la exigencia de autoformación gracias a las sesiones online, es mucho más realista con las diferentes personalidades/situaciones personales y el aprendizaje en grupo, mucho más efectivo y gratificante.

Alumno: qué hacer antes de la clase online

La enseñanza online más eficiente es aquella en la que se realiza un trabajo previo a la clase, tanto por parte del profesor como del alumno.

El alumno que más aprovecha la “oportunidad” de una sesión en vivo, es un alumno que llega conociendo los pilares temáticos de la sesión. Para ello es imprescindible que realice el trabajo prework, o anterior a la clase, que le hayan proporcionado.

No se trata de estudiar desde un punto de vista “memorístico”, sino de una labor de contextualización y de organización de los conceptos necesarios para comprobar su comprensión en la sesión en vivo.

La autoevaluación que el estudiante realizará en la clase sobre su comprensión de la materia, es en mi opinión, el aspecto más importante de una sesión online. Es la herramienta que le permitirá maximizar su aprovechamiento.

Profesor: qué hacer antes de la clase online

En esta etapa previa el profesor es el responsable de establecer la relación con el alumno, porque en mi opinión, una sesión online siempre funciona mejor cuando existe un vínculo previo, un conocimiento mutuo entre el alumno y el profesor. Este vínculo no es tanto personal como en relación a las expectativas, metodologías, y más importante aún, el que da la curiosidad creada.

Existen innumerables herramientas: lecturas recomendadas, test y quizzes online, ejemplos reales y casos, links, referencias temáticas/fuentes recomendables, y por qué no, ejercicios previos que permiten al alumno evaluar su conocimiento sobre la disciplina.

Además, es conveniente establecer los pilares y los objetivos que esperamos conseguir de la sesión, así como explicar de antemano la metodología a utilizar. Una buena programación, por ejemplo, la semana anterior a la clase, en la que día a día podríamos ir incorporando actividades y comentarios; puede ser una opción correcta.

Alumnos: cómo aprovechar una clase online

Supongamos que un alumno se ha preparado la clase, lo que demuestra una actitud que sin duda le va a favorecer. ¿Cómo puede aprovechar al máximo la clase online?

En función de la duración es más o menos complicado mantener la atención (y en función del profesor también), mi consejo es solo 1: participar, participar y participar. Y no dejar de participar, preguntar, interrumpir, exigir explicaciones… es tu momento, ¡úsalo!

Profesor: cómo aprovechar una clase online

Supongamos que los alumnos han preparado la clase, lo que demuestra una actitud que sin duda va a favorecer la sesión. ¿Cómo se puede aprovechar al máximo la clase online?

Pues sí, la duración es un factor importante, pero yo siempre considero:

  • Que la “teoría” de las cosas ya está en Google y el profesor ya ha proporcionado las fuentes fiables. El valor no está en la explicación de lo alcanzable, sino en la experiencia transmitida.
  • No se trata de una clase en donde el profesor habla y los alumnos escuchan pasivamente. Suponiendo que este tipo de enseñanza aún exista.
  • A pesar de ser una sesión online debería haber prácticas. Es más, si la materia lo permite, debería ser una sesión únicamente práctica, en la que se incida en aquellos conceptos que, por experiencia del profesor, son más complicados para los alumnos. “Learning by doing” sigue siendo una norma también en el entorno digital.

¿Acaba la relación con los alumnos cuando dejamos “de grabar”? No.

Si la relación con nuestros estudiantes no termina nunca con la clase, en una clase online es incluso más relevante el postwork o el trabajo y la relación posterior.

Yo quiero que mis alumnos se enamoren de mi materia, quiero que deseen aplicar el conocimiento inmediatamente y me siento francamente mal cuando no me inundan las preguntas de un grupo. La enseñanza online permite compartir esa ilusión sin más frontera que el idioma: es una ventana completamente enriquecedora para todos.

Por Mónica Díaz-Ponte
Profesora de Postgrado de ESIC Business & Marketing School

Para estar al día de las últimas noticias y tendencias en digital, 
suscríbete a la newsletter Dir&Ge