fraude online

En la actualidad España ocupa la cuarta posición mundial en ventas online, con la previsión de que el mercado de la venta de artículos de segunda mano siga creciendo en Internet.

En este contexto el porcentaje de fraude en las transacciones entre particulares también es elevado, ya que un 48% de los españoles ha sufrido un intento de fraude. Como explica Albert Buira, socio de Tripacto, plataforma que evita el fraude en la compra venta online de artículos de segunda mano, “ante un mercado que mueve más de 2.300 millones de euros era necesaria la creación de herramientas que garanticen tanto a comprador como a vendedor sus operaciones online”.

A través de las distintas plataformas que operan en España hoy en día, en nuestro país se venden más de 600 objetos usados por minuto. La proliferación de canales y formas de pago ha hecho que se incrementen los fraudes en este mercado, puesto que muchas de las plataformas de compra venta se limitan a publicar los anuncios sin garantía ni responsabilidad sobre el uso que los consumidores hacen de ella.

Desde Tripacto advierten que las vías más comunes para el timo online son:

– Vendedor desaparecido. Si bien un usuario puede registrarse y colgar un anuncio sin problema en las plataformas de compra venta, puede igualmente desaparecer, dándose uno de los timos más habituales en la venta directa entre particulares.  Son casos donde se suele solicitar un depósito por adelantado para los gastos de envío, que al no ser cantidades grandes, una vez el vendedor desaparece son muchos los usuarios que no se molestan en reclamar. Con la suma de varios timos, al final el vendedor acaba con grandes cantidades de dinero, por lo que desde Tripacto apuestan por “el depósito de garantía, que asegura que el vendedor cobre en caso de que el objeto se acepte por el comprador”. De esta manera, hasta que el comprador no se asegura del estado del producto no liberan el dinero al vendedor.

– Comprador falso. Un timo que se genera cuando el comprador transfiere el importe íntegro del artículo más los gastos de envío y el vendedor recibe la notificación de la operación económica. Aquí el dinero se inmoviliza hasta que el vendedor hace el ingreso en el soporte logístico desde una web falsa. En este caso los vendedores descubren que la operación es falsa una vez hacen el ingreso, perdiendo así el producto y el dinero. Son tipos de operaciones que suelen darse en mercados de alto valor, como el inmobiliario o el de coches.

– Tiendas online fraudulentas. En estos casos se pone a la venta productos en plataformas conocidas y a un precio atractivo. Cuando el comprador contacta con el vendedor, este le indica que el artículo no está disponible pero tiene uno parecido en otro portal, que suele ser una copia falsa cuyo único método de pago admitido es la transferencia bancaria. Una vez el comprador la realiza, el vendedor desaparece sin dejar rastro.

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