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El aumento de la confianza del consumidor, la penetración de Internet en la sociedad y la recuperación del consumo son factores que han incidido en la llegada de una nueva revolución para el franquiciado de hostelería en España.
Las cadenas han comenzado a buscar otras fórmulas mediante las que sus clientes pueden recoger los pedidos online en los locales, y cuando lo necesiten, llevárselos a donde deseen, ampliando así los negocios con el ‘take away’ y el delivery.
En España la diversificación llegó de la mano de las pizzerías, a las que se fueron uniendo otras cadenas como Burger King, Foster Hollywood o Grupo Vips, por la importancia que el envío a domicilio está adquiriendo.
La revolución de la hostelería con la llegada del comercio online Clic para tuitear
Desde Marcas de Restauración, el secretario general, Juan Antonio Díaz Bidart, indica que “el delivery podría suponer en un periodo de cinco años el 20% de las ventas de la restauración en España”. De ahí que se incluyan las cadenas de franquicias, que “trabajan y van a seguir trabajando para competir en el segmento de vender platos preparados”.
Sin embargo, Juan Antonio Díaz ve un posible enfrentamiento de la hostelería con la distribución, dos sectores que en el mundo de las franquicias han encontrado una vía de crecimiento. En ambos segmentos, Internet ha incidido dando la posibilidad de pedir comida a domicilio y de hacer la compra online.
Para Díaz Bidart, mientras que la venta de comida estará lista en toda España, el delivery principalmente se implantará en las grandes ciudades, donde proliferan los hogares unipersonales o de dos miembros.
Este tipo de factores han incidido en que la restauración organizada cierre el 2016 con unas cifras superiores a las previstas, dando por terminado el ejercicio con un crecimiento del 7,6% frente al 4,5% del 2015.
Este crecimiento es debido a la recuperación del empleo, el aumento del número de turistas que visitan España y de la confianza del consumidor que gasta más, y las nuevas tecnologías que actúan como dinamizadoras de las ventas en restauración.
En este escenario se está produciendo una proliferación de aplicaciones móviles con las que encargar comida, pedirla y recogerla u ordenar su envío.
Junto con las apps, ya existen intermediarios que se dedican a unir a los restaurantes con los comensales llevándoles el pedido a casa.
Jesús Rebollo, el director general en España de Just Eat, explica que “España es uno de los países en los que la firma más ha crecido”, entre otras razones por “la rapidez que impone el estilo de vida moderno en el que siempre hay tiempo para cocinar, las largas jornadas de trabajo y los cambios en la organización familiar, unido a la generalización del uso de Internet”.
Según el directivo “más del 75% de los establecimientos adheridos a Just Eat rentabilizan la inversión antes de un mes, y en seis meses aumentan su facturación entre el 15 y el 25%”.
Este impulso ha favorecido la creación de empleo, ya que la restauración organizada genera 135.000 empleos en España, así como un aumento de la facturación obteniendo la hostelería o restauración 5.495,8 millones de euros en 2015, aumentando 3,3 millones con respecto al 2014.