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La irrupción de Internet, así como el cambio en los hábitos de consumo, han creado un marco general que en los últimos años no ha sido muy positivo para las firmas de retail. En este año, a punto de acabar, los consumidores no han recuperado del todo la confianza a la hora de comprar.
Según un análisis de Forrester, los consumidores no han olvidado los efectos de la crisis, lo que les hace todavía bastante cautelosos a la hora de gastar. Además, en los últimos meses, el contexto político internacional ha creado un ambiente de inestabilidad que no ha ayudado a que la confianza se incremente en el comercio.
Los 4 elementos para prosperar en retail en 2017 Clic para tuitear
Pese a esta situación, las marcas no deben olvidarse que los consumidores disponen de cada vez más herramientas de interacción, un hecho que favorece al mundo de las compras y, en consecuencia, al retail.
El porcentaje de búsqueda de información sobre productos de consumo ha ido creciendo en este último tiempo, ya que cada vez son más los internautas que acuden a la red para investigar a diario aquello que compran. Una de las causas principales es el uso de smartphones, que les ha permitido estar conectados en todo momento, lo que hace que se haya producido un cambio en la cultura del consumo. Estamos en un momento en el que los consumidores quieren tenerlo todo en cualquier momento y lugar, lo que afecta directamente a las tiendas. Esta situación ha creado un escenario diferente en el consumo y ha obligado a las firmas de retail a tomar nuevas decisiones, así como a posicionarse de manera distinta.
En el futuro inminente, las compañías deberán priorizar una serie de elementos, y trabajar en base a ellos para poder crecer. Según Forrester, son cuatro los elementos que el sector retail deberá tener en cuenta para prosperar en este 2017.
– El cliente es el rey. No se trata de una frase hecha, ya que si se quiere conectar con los consumidores y llegar hasta su universo cambiante, las compañías deberán poner al cliente en el epicentro de su estrategia. Esto supone un cambio a la hora de trabajar, ya que las marcas no deberán de preocuparse tanto por cómo compra el consumidor, sino por el consumidor como elemento clave.
– Internet entra en juego. Las firmas de retail deberán estar allí donde el consumidor esté, por lo que deben tener presencia en Internet. Hoy los clientes quieren conectar con las marcas en cualquier momento y lugar, por lo que emplean la red para ello, siendo un canal donde pueden tener una presencia óptima y positiva. Aquí las firmas deberán buscar la calidad, no “estar por estar”, lo que supone que cada punto de contacto debe funcionar, y debe ser creado y ajustado al contexto en el que vaya a usarse.
– No olvidar la tienda. En las decisiones de consumo, aunque Internet cobra cada vez más peso, no hay que perder de vista la esencia del retail, como son las propias tiendas físicas. Las marcas deben igualmente cuidar la experiencia en tienda, trabajando para que esta sea memorable. Además, será importante buscar cómo coordinar esta estrategia con las de los demás escenarios, con ofertas como por ejemplo el click&collect.
– Empresas digitales. Por último, el gran cambio para las empresas de retail llegará cuando sean capaces de reajustar sus necesidades a los nuevos tiempos y adaptarse al entorno online. Si se desea un buen resultado en el futuro hay que convertir a la compañía en una organización actualizada al mundo digital, siendo capaz de tener el talento necesario y las herramientas digitales que les permitan triunfar en la era digital.