El 43% de los compradores españoles ha realizado al menos una compra a través de dispositivos móviles durante 2018.
#mcommerce y #socialcommerce: las modalidades de compra que conquistan a los consumidores Clic para tuitearEspaña ya ocupa el cuarto lugar en el ranking de países europeos cuyos consumidores hacen uso del smartphone o la tablet para llevar a cabo sus compras a través de internet, según datos de Deusto Formación. A pesar de todo, aunque el proceso de compra comience en el teléfono móvil con la búsqueda de productos, la operación final se realiza todavía en el ordenador. Así, el 71% de las compras por internet en España se hacen aún en el ordenador, según datos de IPSOS.
El margen de crecimiento del mobile commerce es todavía amplio en el mercado español y es importante que las empresas incorporen soluciones específicas para impulsar el crecimiento a través de este canal.
La ropa, los viajes y los libros son las categorías que más se compran online por los consumidores españoles. El precio, la comodidad o los envíos gratuitos son algunos de los motivos que motivan la compra a través del mobile commerce. De esta forma, se prevé que el 70% de los internautas realizarán compras a través del móvil en 2021.
Social y mobile commerce: futuro del comercio electrónico
En este sentido, el auge del mcommerce viene de la mano del crecimiento notable del social commerce, evolución natural del comercio electrónico. Según datos de Poshmark, el 72% de los consumidores se inspira en Instagram a la hora de buscar productos y el 74% de los millennials consideran que las redes sociales influyen en sus decisiones de compra.
En el año 2017, tan sólo el 17% de las plataformas de comercio electrónico contaba con estrategia social, mientras que en 2018 esa cifra se elevó hasta el 33%, lo que evidencia que los retailers son cada vez más conscientes de la importancia de las plataformas sociales para potenciar las ventas.
El comercio social aprovecha las interacciones humanas destacas en las redes sociales para impulsar transacciones más personales y envolventes y generar una experiencia de compra con valor añadido. A pesar de todo, el mobile commerce todavía tiene que adaptarse a las exigencias del consumidor actual y trabajar por un proceso de compra sin fricciones.