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Con la pandemia, las tiendas físicas se han visto afectadas de forma directa. En los periodos de confinamiento, aquellos establecimientos de servicios no esenciales tienen que cerrar sus puertas de forma temporal. A ello se suman medidas como los aforos reducidos o las reticencias de los consumidores a acudir a espacios cerrados o con muchas personas.

En este contexto, los vendedores se han encontrado con la dificultad de trasladar a los nuevos entornos las experiencias que ofrecían en las tiendas físicas.

Las tiendas virtuales se presentan como una oportunidad para evocar la experiencia física de forma digital. Clic para tuitear

La alternativa del comercio electrónico permite a las tiendas seguir operando desde el canal online. Algunas tiendas han tenido que abrir su eCommerce por primera vez y otras han reforzado este canal o han apostado por formatos híbridos como el click&collect.

No obstante, las tiendas físicas aportan, muchas veces, más que un simple proceso de venta. Son espacios para experiencia, de trato directo con el cliente y atención personalizada.

En este sentido, las tiendas virtuales se presentan como una oportunidad para evocar la experiencia física de forma digital, una iniciativa que ya están probando diferentes gigantes del retail y marcas de productos de consumo.

Las pruebas no están limitadas a Estados Unidos y ya han arrancado también en Europa: Clarins, una de las marcas que ha desarrollado una tienda virtual, la ha lanzado en Francia. Ralph Lauren o GAP son otras de las compañías que han lanzado su propia visión del formato.

Funcionamiento de una tienda virtual

Las tiendas virtuales ofrecen una experiencia eCommerce más personalizada y cercana que la venta online tradicional.

No obstante, que sea una tienda virtual no implica que sea necesariamente de realidad virtual, lo que hace que la idea y el formato sean potencialmente accesibles a los consumidores. Sin embargo, algunas compañías han desarrollado propuestas experimentales recurriendo a la realidad virtual, como es el caso de Alibaba en China durante el día de los Solteros.

Recrear la experiencia

Las tiendas virtuales están abiertas en todo momento e intentan evocar la experiencia de retail. La de Ralph Lauren, por ejemplo, es una réplica de una tienda real situada en Los Ángeles y la de Clarins ofrece actividades interactivas como, por ejemplo, hacer consultas de piel.

Para los gigantes del retail, las tiendas virtuales podrían ser una forma de mantener a los consumidores conectados con las cadenas de retail y que sigan generando interés para que, cuando todo termine, se pueda recuperar el tráfico.

De esta forma, para algunas marcas, las tiendas virtuales serán una pieza clave en descubrimiento de productos o personalización de la experiencia de cliente.  

Fuente: Puro Marketing