Cuando tu software de gestión deja de ser funcional para el negocio

¿Estás seguro que el software de gestión que tienes instalado desde hace años sigue siendo operativo y está mejorando realmente el rendimiento de tu empresa?

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El software de gestión es uno de los programas con mayor implantación dentro de las pymes y las grandes compañías debido a las soluciones que facilita. Sistemas ERP que controlan y optimizan los recursos empresariales, automatizan procesos y facilitan la toma de decisiones. Sus funciones en cuanto a cadenas de suministro, inventarios, fabricación, control de calidad, facturación, presupuestos o producción, entre otras muchas prestaciones, son vitales para la correcta productividad de una empresa, su competitividad y su crecimiento.

Pero ¿estás seguro que el software de gestión que tienes instalado desde hace años sigue siendo operativo y está mejorando realmente el rendimiento de tu empresa? Cuidado, si no es así, estás pagando un precio muy alto por mantener una solución que no hará otra cosa que estancar tu negocio frente a las enormes posibilidades que ofrecen los sistemas informáticos actuales.

En plena era de la digitalización empresarial, es importante estar al día con las nuevas tecnologías y no perder las capacidades productivas que ofrecen las actuales herramientas, de cara sobre todo a nuestra competencia y a nuestros clientes. Los costes de rendimiento que genera un software de gestión ineficiente son siempre mayores que los que supone invertir en una nueva solución.

¿Cómo saber si el software de gestión ya no cumple con sus funciones?

La renovación tecnológica es fundamental para toda empresa si quiere seguir evolucionando y no quedarse atrás en el mercado. Cada vez hay mayores facilidades funcionales, de accesibilidad, de sencillez de uso y de valores añadidos que un software de gestión anticuado no puede integrar.

Podemos definir unas claves concretas para saber si el programa que tienes instalado ya no te sirve para optimizar tu negocio.

• Lentitud en los procesos. El sistema cada vez es más lento para realizar sus procesos habituales o, por otro lado, crees que simplemente no es tan rápido como debiera. En este caso, tu productividad y tu estrategia comercial están en juego.

• No es capaz de desarrollar tus nuevas metas. Puede que hace años, cuando instalaste la solución, esta cubriera perfectamente tus necesidades empresariales. Pero, con el tiempo, los objetivos y el mercado cambian y evolucionan. Tu software de gestión debe avanzar contigo y ser capaz de afrontar nuevos escenarios, maquinarias, procesos, etc.

• Obsolescencia. Han dejado de presentarse nuevas versiones o actualizaciones del programa. Claramente, ya no es eficiente ni lo será.

Es hora de cambiar y avanzar

Si has identificado algunos de estos síntomas, ha llegado el momento de dar un paso al frente e instalar un nuevo software empresarial. En este caso, debido a la gran cantidad de soluciones que existen en el mercado, lo mejor para elegir el que más nos conviene es dejarse asesorar por profesionales.

Existen compañías como SoftDoit, la primera consultora online de software en España para empresas, que ofrece servicios de asesoría y comparativas de programas informáticos de manera neutral, rápida, personalizada y gratuitas. De esta forma, sabremos que el software que hemos elegido se adapta realmente a las necesidades de nuestro negocio en particular.