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El éxito de cualquier negocio, y especialmente en el sector de la restauración, radica en la capacidad que tienen los propietarios en controlar y gestionar cada una de las áreas o departamentos de su establecimiento. Cuanto más ágiles puedan ser estos procesos mayor rentabilidad se obtendrá.

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Tiempo de Lectura: 3 minutos

por Igor Treslin, CEO de Storyous

La situación de los sistemas de gestión en la restauración española

STORYOUS logoEs cierto que, en muchos casos, los propietarios cuentan con excelentes profesionales en el equipo que pueden hacer más fácil esta tarea; sin embargo, seguirá siendo insuficiente si se compara con lo que la tecnología puede hacer en este sentido. No contar con una herramienta online de gestión puede conllevar, entre otras cosas, desajustes en las partidas y en el stock del local, afectando al correcto funcionamiento del negocio.

En este punto es donde se hace patente la necesidad de contar con un sistema tecnológico de gestión que esté adaptado a las necesidades reales de un negocio de restauración. Un sistema que sea capaz de evolucionar y adaptarse constantemente.

Analizando lo que ocurre en España, y comparándolo con otros países cercanos, hay datos que resultan chocantes, como por ejemplo el hecho de que España sea el país con el mayor número de bares y restaurantes de Europa y, sin embargo, no cuente con una oferta sólida de sistemas de gestión. Si  la tecnología ha cambiado numerosos aspectos de nuestras vidas -sin ir más lejos, el modo en el que contratamos un viaje o reservamos unas vacaciones- ¿por qué no aplicarla a nuestro negocio de restauración?

Storyous: mayor control y capacidad para rentabilizar

Igor Treslin, CEO Storyous
Igor Treslin, CEO de Storyous

El verdadero control del establecimiento es el mayor beneficio que aportan estos sistemas tecnológicos de gestión. Con programas como Storyous, los propietarios del sector de la gastronomía son capaces de ver qué está ocurriendo en su negocios en tiempo real, cuánto dinero están ganando (o perdiendo) en ese preciso momento, qué productos son los más demandados y, por tanto, los que necesitan reponer más a menudo. Y lo que es mejor, sin necesidad de estar físicamente en el establecimiento. Pueden comprobarlo desde cualquier lugar, simplemente utilizando un dispositivo con conexión a Internet, por ejemplo, a través de sus teléfonos móviles o tablets.

Los cambios empiezan por algo tan básico como sustituir la tradicional caja registradora por un sistema Terminal Punto de Venta (TPV) más moderno, lo que permite que se centralice toda la información y el propietario ahorre tiempo y dinero gracias a la informatización de los datos y las cuentas.

El control del stock es otro de los aspectos más relevantes para un negocio de hostelería dado que un fallo en esto puede suponer importantes pérdidas de tiempo y dinero. Con los sistemas de gestión tecnológicos, la información del inventario está controlada de forma automática y en tiempo real, sin necesidad de volcar datos de forma manual, lo que además puede provocar numerosos errores. Estos sistemas, además de permitir saber qué productos son los más demandados o cuáles son aquellos a los que debemos dar salida porque pueden caducar próximamente, nos alertan de la necesidad de hacer un nuevo pedido a nuestros proveedores.

Los beneficios de un sistema de gestión

storyous sistemaOtra de las novedades que trae consigo la innovación tecnológica es la posibilidad de tomar las comandas directamente desde dispositivos móviles. Según nuestros datos, el uso de un comandero electrónico puede reducir en 45 minutos el tiempo de cada servicio y reducir un tercio los pasos que debe dar un camarero desde que se hace el pedido hasta que puede servirlo en la mesa. En términos económicos, estaríamos hablando de un incremento del 8% en ventas.

Si a todo esto le añadimos la posibilidad de integrar servicios ofrecidos por terceros, como pueden ser empresas de entrega de comida a domicilio o de reservas vía web, estamos multiplicando nuestra capacidad de gestión y control y, por lo tanto, de rentabilizar todavía más y mejor nuestro establecimiento.

A todo esto tenemos que sumarle uno de los aspectos más importante que es el de tener la capacidad de analizar toda la información. De poco sirve tener todos los datos bajo control si no extraemos conclusiones de ellos. Un sistema tecnológico de gestión, a través de sus estadísticas y gráficas de venta, facturación, beneficio, rentabilidades…,  nos ayudará a tomar decisiones como posibles cambios en los horarios de apertura, servicios adicionales que podamos añadir, medidas que se puedan tomar con respecto a la plantilla (quizás ampliar el equipo, cambiar a determinada persona de turno…), promociones especiales para dar salida a determinados productos, cambios en precios, entre muchos otros aspectos.

Esto, al final, se traduce en un gran ahorro de tiempo. Tiempo que podemos dedicar a lo que realmente importa para el buen funcionamiento del negocio: los clientes y su satisfacción.

Si usamos la tecnología en todos los ámbitos de la vida, ¿por qué la restauración iba a ser menos?