La inteligencia artificial está revolucionando todos los sectores, y los departamentos de Recursos Humanos no son la excepción. La tecnología, como ChatGPT está facilitando la optimización de procesos, automatizando tareas rutinarias y proporcionando datos que permiten una gestión más precisa del personal. Sin embargo, no todas las funcionalidades que ofrece son igualmente útiles o éticas, y los profesionales deben aprender a manejar estos nuevos recursos con precaución.
ChatGPT, un modelo de IA generativa, es uno de los asistentes virtuales que está ganando terreno en la gestión de personas. La tecnología ha sido integrada en múltiples plataformas empresariales, incluyendo ERPs y software de productividad, con el objetivo de simplificar la interacción con grandes volúmenes de datos y optimizar la toma de decisiones en el área de Recursos Humanos. La velocidad y precisión que ofrece esta herramienta en el análisis de información representan una ventaja competitiva en la gestión empresarial, pero su implementación plantea dilemas sobre la privacidad y la ética en el manejo de datos sensibles.
Joan Pons, CEO de WorkMeter, destaca la importancia de conocer a fondo las capacidades y limitaciones de la IA en este contexto: “La aplicación de herramientas de IA a la gestión diaria de los recursos humanos abre enormes posibilidades para la función en cuestiones como la automatización de tareas, la optimización de recursos o la anticipación de incidencias y escenarios. Pero su uso efectivo requiere una curva de aprendizaje por parte de los profesionales de gestión de personas, así como tener muy claro para qué sirven, para qué no y cuáles son sus límites”.
IA generativa en Recursos Humanos: las aplicaciones más útiles
WorkMeter ha incorporado ChatGPT a sus soluciones para la gestión horaria y la medición de la productividad. La herramienta, conectada a las métricas de la empresa, permite a los profesionales hacer preguntas en lenguaje natural y recibir respuestas detalladas basadas en los datos de la organización. Esta integración ha sido diseñada para evitar intrusiones en la privacidad de los empleados, incluyendo filtros que limitan el acceso a información sensible. La compañía ha desarrollado un listado de preguntas apropiadas e inapropiadas que ilustran cómo debe utilizarse esta tecnología en la gestión de personas.
Cinco preguntas que sí se pueden hacer a GhatGPT en la gestión de personas
1. ¿Cuánto tiempo y recursos estamos dedicando a un proyecto?
Una de las principales ventajas de la IA es su capacidad para ofrecer información detallada sobre la eficiencia de los proyectos en tiempo real. Preguntando a ChatGPT sobre la cantidad de horas y recursos invertidos en un proyecto, los responsables de Recursos Humanos pueden comparar su rentabilidad con otros proyectos, identificando posibles desequilibrios y áreas de mejora.
2. ¿Está este equipo equilibrado?
La IA puede analizar la carga de trabajo de los miembros del equipo, identificando posibles desequilibrios en la distribución de tareas. Esta capacidad permite ajustar las asignaciones en función de la disponibilidad y la carga real de cada empleado, mejorando la eficiencia general del equipo y reduciendo el riesgo de agotamiento o sobrecarga en algunos miembros.
3. ¿En qué fallan o aciertan mis proyectos?
El análisis de datos es uno de los grandes puntos fuertes de la IA. ChatGPT puede identificar patrones de éxito y error en los proyectos, proporcionando una visión clara de las áreas que necesitan atención y las prácticas que deben potenciarse. Esta funcionalidad es especialmente útil para ajustar estrategias y mejorar procesos de forma continua.
4. ¿Somos más productivos teletrabajando o en presencial?
La IA permite comparar de manera objetiva la productividad en diferentes modelos de trabajo. Mediante preguntas específicas sobre la productividad del equipo en distintas modalidades, los responsables de Recursos Humanos pueden identificar qué sistema ofrece mejores resultados para la empresa, apoyando la toma de decisiones sobre políticas de trabajo flexible o híbrido.
5. ¿Qué días de la semana/mes/año voy a necesitar reforzar mi equipo?
La capacidad predictiva de la IA facilita la planificación en Recursos Humanos. ChatGPT puede anticipar picos de trabajo y periodos de alta demanda, permitiendo a los responsables de personal ajustar los recursos de manera proactiva. Esta información también es útil para prever épocas de mayor absentismo o posibles interrupciones en la operativa, ofreciendo datos para planificar con antelación.
Preguntas que no se deben hacer a ChatGPT en un entorno profesional
1. Si tuviera que prescindir de un colaborador, ¿a quién escogerías?
La ética en la gestión de personas es fundamental, y ChatGPT no debe ser utilizado para tomar decisiones que afecten directamente a la carrera profesional de los empleados. La IA está diseñada para procesar datos objetivos y ofrecer apoyo en la toma de decisiones, pero no para sustituir el criterio humano en cuestiones tan delicadas como la continuidad laboral de un trabajador.
2. ¿Qué está haciendo ahora determinado empleado?
La privacidad de los empleados es una prioridad en cualquier entorno profesional. Las herramientas de IA no deben convertirse en instrumentos de vigilancia. ChatGPT puede acceder a datos generales y registros de actividad volcados en el sistema, pero no a la actividad en tiempo real de los empleados. Su función es ofrecer información agregada y analizar tendencias, no monitorear comportamientos individuales.
3. ¿Hay algún empleado que haga mal su trabajo?
El análisis del desempeño laboral no es una tarea que deba delegarse a una máquina. ChatGPT no está diseñado para emitir juicios sobre la calidad del trabajo de un empleado concreto, sino para ofrecer información basada en datos objetivos que permita a los responsables de Recursos Humanos tomar decisiones informadas. La evaluación del desempeño requiere de un análisis detallado y, a menudo, subjetivo que no puede realizarse únicamente a partir de datos numéricos.
Nuevas prácticas para la gestión de Recursos Humanos con IA
La incorporación de la inteligencia artificial en Recursos Humanos es una oportunidad para redefinir la gestión de personas, siempre que se respeten los límites éticos y se eviten los usos indebidos de la tecnología. Los profesionales deben entender que la IA es un aliado para optimizar procesos y facilitar la toma de decisiones, pero nunca un sustituto del juicio y la sensibilidad humana.
WorkMeter, consciente de la necesidad de guiar a las empresas en la adopción de estas tecnologías, ha establecido una serie de directrices y prácticas recomendadas para el uso de ChatGPT en la gestión de personas. Estas recomendaciones se centran en la transparencia, el respeto a la privacidad y la responsabilidad en el manejo de los datos personales.
El avance de la IA en los departamentos de Recursos Humanos es innegable, y su potencial para mejorar la eficiencia es enorme. Sin embargo, el desafío está en encontrar el equilibrio entre el uso de la tecnología y la protección de los derechos de los empleados. Los responsables de RRHH deben estar preparados para integrar estas herramientas en sus procesos de manera responsable, garantizando que las decisiones sigan siendo justas y respetuosas con la privacidad y dignidad de las personas.
Fuente: RRHH Press
