Barritas insectfit

Los insectos se han convertido en una de las tendencias alimentarias del momento. Muchas empresas se han lanzado a la elaboración de productos derivados de insectos cambiando la forma actual de entender la alimentación. Insectfit nos cuenta de primera mano su caso de éxito. 

.@insectfit, toda una revolución alimentaria #innovación Clic para tuitear

Tiempo de Lectura: 5 minutos

«Muchos insectos son ricos en micronutrientes y proporcionan aminoácidos, energía, ácidos grasos, proteínas, y diez veces más vitamina B12 que el salmón” Así lo asegura la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación (FAO)

Leyendo esta noticia fue como Gabriel Vicedo, graduado en Turismo + ADE por la Universidad de Alicante se convirtió en el CEO de INSECTFIT, una empresa española pionera en promover la alimentación a base de insectos.

¡Por favor, una de insectos a la parrilla! ¿Te lo podrías imaginar? Pero la realidad es que INSECTFIT opta por otro tipo de consumo. Vicedo elabora, de la mano de Alberto Más Gomis (graduado en nutrición humana y dietética por la Universidad de Alicante y COO de INSECTFIT) alimentos a base de harina de insectos: empiezan por las barritas energéticas, pero tienen ya en mente las pastas y otros derivados.

¿Cómo surgió la idea?

Tras leer la noticia del FAO donde especificaba que los insectos eran la proteína del futuro, Vicedo decidió utilizar el tema como trabajo final de grado.

A medida que investigaba, más se daba cuenta de que podría ser una oportunidad para emprender un proyecto. Se lo explicó a su amigo y futuro socio Alberto, que, al ser nutricionista, podría parecerle interesante. Durante una barbacoa con más amigos les comentó la idea, a éstos les pareció una algo jocoso y, sobre todo, disparatado. Alberto investigó más sobre el tema y al comprobar que podría ser una buena idea, se unió a Gabriel.

¿Cómo fue su desarrollo?

Para llevar esta idea a cabo decidieron ponerse rumbo a Valencia y presentar su proyecto al programa Lanzadera, una iniciativa que apoya a emprendedores y nuevos talentos impulsado por Juan Roig. Tras horas de trabajo y esfuerzo consiguieron ser escogidos y comenzaron su proyecto.

Al principio, encontraron trabas con los organismos públicos ya que debían registrar los alimentos a nivel europeo, debido a que en España son totalmente nuevos pero en diversos países de Europa (Reino Unido, Francia, Holanda…) es algo cotidiano. Seguidamente, se pusieron en marcha contactando con laboratorios y granjas para criar y hacer la harina de insecto, decantándose por empezar la cadena desde el final, empezando como elaboradores del producto final e ir integrando los procesos de producción.

Poco a poco, muchos medios de comunicación como La Sexta, Tele Valencia, Europa FM, El País, Onda Cero, Los 40 “anda ya”, Cadena COPE, Diario de Emprendedores, etc. se fueron interesando por el proyecto de estos emprendedores y comenzaron a realizar entrevistas y a ofrecer todo tipo de información a cerca de esta iniciativa.

La realidad es que esta idea comenzó con mucha ilusión y pocos resultados. Los procesos iban más lentos de lo esperado y la cuesta parecía cada vez más empinada, pero, ¿emprender, tarea fácil?

A pesar de ello, se apreciaban ciertos avances. Uno de ellos, fue ver como el día 1 de enero la legislación permitió comercializar insectos en España. Cierto es que ese mismo día, se pretendía comercializar diversos productos elaborados, pero el problema burocrático a la hora de empezar a vender era más tedioso de lo esperado.Pero, INSECTFIT se prepara para distribuir sus productos a partir de este marzo 2018. Comercilizándose en el mercado y a través de su página web.

El modelo de negocio

INSECTFIT ofrecerá barritas energéticas de caramelo, chocolate y naranja con chocolate listas para consumir en primera instancia, pastas alimenticias y derivados más adelante.

En el proceso de elaboración, ellos son intermediarios, la conexión entre los distintos factores de producción, pero siendo los que ofrecen el producto final. Compran la materia prima de Tailandia por falta de regularización en empresas europeas. Después facilitan el producto a un laboratorio de Andalucía. Allí lo confeccionan y lo preparan con los packaging de INSECTFIT.  Y ¡voilà! Listo para el ¡buen probicho!

Además, ¡están de muerte! Las pruebas alimentarias realizadas con harina de insectos corroboran lo bien que saben. Tienen un sabor muy conseguido, como a frutos secos. A parte de los sabores tan puros y sabrosos que han logrado en la elaboración de barritas energéticas, cuyas pruebas con clientes finales fueron un éxito.

El sector alimentario desde Insectfit

Antes de sumarse a este proyecto, estudiaron sus oportunidades en el mercado español y comprobaron que introducir los insectos en la alimentación humana era algo impensable. El rechazo estaba más que asegurado.

Aún así, decidieron emprender y comprobaron, en menos de un año, como muchas personas descolgaban sus teléfonos para ponerse en contacto con ellos, pidiéndoles iniciativa y/o consejo para introducirse en el mundo de la entomofagia. Es por ello por lo que opinan que el sector de la alimentación está en constante cambio. Tambén, han podido comprobar como actualmente, muchas empresas están intentando sumarse a esta iniciativa, ya sea dedicándose a la cría, producción o distribución de insectos.

Además, consideran que el sector de la alimentación es uno de los que más innova. La cultura de la salud y el culto al cuerpo es algo que está cada vez más presente en nuestra sociedad, y la alimentación es algo crucial para ello. Por esta razón, las empresas del sector innovan día tras día, con nuevos productos cada vez más saludables, enfocados a la población que quiere llevar una alimentación sana.

Los insectos, ¿futuro de la alimentación?

El problema de la escasez de alimentos dentro de una década se solventará gracias a la diversidad. Dice Frøst que, «la diversidad es igual a la resiliencia – cuanto más diversas sean nuestras dietas, más seguridad alimentaria tendremos. Si excluyes a los insectos, estás eliminando una parte importante de la diversidad».

Los expertos de la agencia de la ONU están convencidos de que los insectos permitirán alimentar a los 9.000 millones de humanos que poblarán el mundo en el año 2050. “Es más fácil producir nutrientes con insectos y mucho más barato que hacerlo con la ganadería convencional”, comenta J. Arancet (médico especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública)

En la actualidad, ya hay 122 países que se alimentan de ellos. La entomofagia, ya se da en Asia, América y Oceanía y, también, Europa. Aún así, la Unión Europea es consciente de que no será fácil salvar los prejuicios contra el consumo de grillos y escarabajo en primera instancia. Aunque los tailandeses, expertos en este sector, afirman que se pueden comer de cualquier forma pero como todo, es cuestión de ponerse.

INSECTFIT está invirtiendo tanto esfuerzo en su lucha por la diversidad alimentaria que trabajan sin horario. Aunque son conscientes de que cualquier proyecto empresarial que acaba de empezar, trabaja las horas que hagan falta y sin ninguna retribución económica al principio.

Pero lo importante, es que INSECTFIT sabe de qué está hecho y lo beneficioso que podrían resultar para la población española. Conocen cuáles son sus objetivos y por ello, dejar de avanzar no es una opción.

¿Pan de molde o suplementación energética? Ellos lo tienen claro, ¡de harina de grillo común!

¡Bienvenido el buen probicho!