El gigante asiático quiere explorar nuevos modelos para promover la innovación y el espíritu emprendedor, motivo por el que el Gobierno se ha propuesto ampliar el espíritu emprendedor de las empresas para redirigir la economía hacia un panorama más sostenible a largo plazo.
Así lo puso de manifiesto el viceprimer ministro de China, Zhang Gaoli, en el foro sobre el espíritu emprendedor de las masas e innovación.
Para Zhang la innovación es ya el motor de impulso del crecimiento económico, por lo que el Gobierno ha decidido ampliar las medidas de ayuda para los negocios emergentes.
De esta manera China optimizará sus políticas fiscales preferenciales para las compañías que se involucren en I+D a partir de 2016. Desde el 1 de enero, todas las actividades que tengan relación con la investigación y el desarrollo serán abarcadas por una política en la que se reducirán más los ingresos de las empresas que estén sujetos a impuestos.
Así lo ha expresado el Consejo de Estado a través de un comunicado, explicando que con esta política estructural para reducir los impuestos se busca que las compañías inviertan más en innovación y nuevas compañías, así como en su modernización industrial.
Las cuotas relativas a la consulta a expertos, los costes de las investigaciones a medio y largo plazo, y otros gastos relacionados disfrutarán de una política fiscal preferencial.
Asimismo los impuestos de las empresas de capital de riesgo serán eliminados para potenciar la inversión en firmas tecnológicas en pequeñas y medianas empresas.
Otros elementos que también se intentan conseguir con este tipo de medidas es generar más empleos, así como inspirar la creatividad, promover el reajuste estructural y facilitar el crecimiento económico.
En una reunión del ejecutivo otro de los requerimientos fue la aceleración de la construcción del Centro Financiero Internacional de Shanghai, así como medidas piloto de reformas financieras en la Zona de Libre Comercio.
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