«Si el pasado fue futuro en un presente,
y el presente será pasado en un futuro,
¿no será el futuro,
pasado,
que se nos hace presente?«
Machine Learning en cinco versos y veintiséis palabras
By @InternationalCIO
Introducción
Desde sus orígenes en los años 80 como consecuencia de la tercera revolución industrial, el objetivo de la tecnología ha sido informatizar los procesos de negocio que las empresas desarrollan para llevar a cabo su actividad diaria. Esta informatización ha tenido como consecuencia la optimización del tiempo y la mejora de la calidad en la ejecución de dichos procesos empresariales. La tercera revolución industrial aportó a las empresas soluciones tecnológicas a nivel de software, hardware y comunicaciones que se han ido desarrollando durante los últimos cuarenta años hasta alcanzar un nivel de sofisticación suficiente y necesario como para abordar otros retos más ambiciosos, como son la Transformación Digital y la aplicación de la Tecnología Orientada a la Inteligencia o Inteligencia Artificial, como se conoce popularmente.
¿Es la inteligencia artificial “solamente” una capa tecnológica más?
La inteligencia artificial es una de las cinco tecnologías que la transformación digital está incorporando a nuestras vidas. No me canso de repetir que los principios básicos de la transformación digital son la #conectividad, la #agilidad y la #colaboración y sus aspectos fundamentales son las cinco tecnologías asociadas, es decir, Internet de las Cosas, Block Chain, Inteligencia Artificial, Cloud Computing y Ciberseguridad.
Tanto la tecnología tradicional como la tecnología orientada a la inteligencia desarrollan su aplicación en las tres dimensiones temporales: el pasado, el presente y el futuro. Entender en qué ámbito temporal y de qué forma se aplica la tecnología tradicional en comparación con la tecnología orientada a la inteligencia es la clave para saber dónde y cuándo podemos aplicar inteligencia artificial. Hemos de asumir que esta evolución tecnológica será adoptada globalmente quedando solamente libres de la aplicación de la Inteligencia Artificial las empresas que sufran el Síndrome de Nodak. ¿Lo conoces?
En este artículo vamos a desarrollar cómo se aplican los dos modelos tecnológicos, tradicional y orientado a la inteligencia, en los tres ámbitos temporales: pasado, presente y futuro.
La tecnología tradicional y las tres dimensiones temporales
Como ya hemos adelantado, tanto la tecnología tradicional como la tecnología orientada a la inteligencia procuran trabajar en los tres ámbitos temporales: pasado, presente y futuro.
La tecnología tradicional ha procurado desde sus inicios informatizar los procesos de negocio que las empresas y sus empleados realizan todos los días, es decir, su objetivo principal fue y ha sido “resolver el presente”. Por ejemplo, en los tan famosos ERP’s el usuario puede introducir los pedidos, se pueden llevar a cabo los procesos de facturación, las gestiones de compra, etc. Mediante los CRM’s los agentes comerciales almacenan toda la información sobre los clientes, se programan las visitas y toda la información comercial sobre posibles clientes o clientes reales. Existen sistemas de gestión de almacén que nos ayuda con toda la operativa que se realiza en estas instalaciones. En definitiva, durante los últimos cuarenta años hemos desarrollado un amplio abanico de soluciones tecnológicas que nos ayudan a resolver el día a día de las empresas, resolver el presente.
La tecnología tradicional ha evolucionado también en los sistemas de reporting, ofreciendo toda la información sobre lo que ha sucedido en la empresa el día, mes o año anterior. Esta información se ofrece de forma muy estructurada a fin de ayudar en el seguimiento del estado de la empresa y para así tomar las decisiones adecuadas. Luego podemos decir que la tecnología tradicional “suministra el pasado”. La tecnología más representativa referente a la gestión del pasado son los productos categorizados como BI (“Business Intellence”). Hemos sido testigos de cómo han evolucionado estos sistemas, partiendo de soluciones que nos obligaban a desarrollar universos complejos de reporting y que necesitaban muchas horas de computación nocturnas, a los actuales sistemas, mucho más ligeros y sencillos de parametrizar. Sin duda ha sido una tecnología que ha evolucionado mucho durante los últimos diez años.
Nos queda entonces el futuro, ¿qué relación tiene la tecnología tradicional con el futuro?: La respuesta es sencilla, ninguna.
La tecnología tradicional:
“Resuelve el presente”
“Suministra el pasado”
“Ignora el futuro”
La inteligencia artificial y las tres dimensiones temporales
La tecnología orientada a la inteligencia o inteligencia artificial tiene una relación algo distinta con los tres ámbitos temporales y entender dicha relación nos dará las claves para saber dónde y cuándo aplicarla y cuál es el verdadero valor añadido de esta tecnología. La inteligencia artificial se apoya en la tecnología tradicional, se complementa, por lo tanto, no va a repetir objetivos y si lo hace no lo hará de la misma manera.
La relación que tiene la inteligencia artificial con el presente puede ser la misma que la tecnología tradicional, es decir, también podemos considerar que “resuelve el presente” pero de forma distinta, bastante más dinámica, flexible y sofisticada. Por ejemplo, un proceso EDI (Electronic Data Interfaz) de tecnología tradicional puede tomar un pedido incluido en un mensaje e introducirlo en el ERP. El problema es su rigidez, o respetas el formato EDI o el pedido no se introducirá y nos provocará un error (los famosos “Idocs”, ¿te suenan? Por el contrario, la tecnología orientada a la inteligencia implementa procesos que son capaces de interpretar los mensajes e identificar cambios a través de la analítica semántica, sin que la estructura del mensaje sea tan rígida y monolítica. Es decir, hacemos lo mismo, leer un mensaje EDI y crear un pedido en un ERP, pero aplicando inteligencia por lo que resolvemos más con menos intervención del usuario y de forma más eficiente. Esta diferencia es clave para saber dónde aplicar inteligencia artificial en la automatización de procesos. No nos vale con desarrollar RPA’s (Robotic Processes Automation), esto lo llevamos haciendo desde hace muchos años. Si queremos resolver el presente en base a la tecnología orientada a la inteligencia debemos reformular esos RPA’s para que sean inteligentes y tengan la misma capacidad de reacción que tenemos los humanos ante modificaciones o imprevistos. Bueno, si no es la misma, semejante. En resumen, la inteligencia artificial también resuelve el presente como lo ha venido haciendo la tecnología tradicional en los últimos años, si bien, la inteligencia artificial lo “resuelve inteligentemente”, este simple adverbio dota de toda la semántica necesaria para comprender la diferencia de enfoque. La transformación digital se entiende en base a sus adverbios, pero este aspecto gramatical lo dejaremos para otro artículo.
¿Qué relación tiene la inteligencia artificial con la dimensión del pasado? Estoy completamente seguro de que ya lo sabes: El pasado es la experiencia, el pasado son los datos. Hemos descrito anteriormente que la tecnología tradicional suministra esos datos, suministra el pasado. Pues bien, la Inteligencia artificial los necesita, los usa, los utiliza. ¿Con qué objetivo? Vamos a ello…
He aquí el gran aporte, bajo mi punto de vista, de la inteligencia artificial. Lo que nos abruma, nos atemoriza y nos previene: La tecnología orientada a la inteligencia “propone el futuro”. La Inteligencia artificial se nos vuelve descarada y como una madre o padre de familia o un sabio experto se atreve a decirnos lo que vamos a hacer o haremos en un futuro, y, por supuesto, para ello, necesita nuestro pasado, necesita los datos. Todos hemos experimentado cómo se nos propone responder a un email, o a un chat. Vemos cómo a través de la analítica de datos y las técnicas de Machine Learning podemos predecir ciertas variables y proponer decisiones de futuro, etc. Créeme cuando te digo que este aspecto es sin duda alguna el más significativo de la inteligencia artificial y el que más va a cambiar nuestras vidas y negocios en los próximos años. Aquellos que lo entiendan, inviertan y lo dominen, se harán con el mercado es su sector. Los que por el contrario lo ignoren quedarán en la mediocridad tecnológica en con el paso de los años o mucho peor, si están afectados por el Síndrome de Nodak, simplemente desaparecerán del mercado.
Tenemos muchos ejemplos de la aplicación de la inteligencia artificial en el espacio temporal del presente y futuro, pero hay una aplicación que últimamente me está llamando mucho la atención. Me refiero a los navegadores que tenemos en los coches o en los móviles y que usamos para que nos guíen en aquellos casos en los que no conocemos el destino o el camino a seguir. Estos navegadores resuelven el presente para conducirnos por donde tenemos que circular, utilizan los datos de los otros conductores que han suministrado en el pasado para darnos la mejor ruta teniendo en cuenta el día y la hora en la que nos encontramos y las incidencias del tráfico del momento. Es un claro ejemplo de cómo la inteligencia artificial con el suministro del pasado, datos, nos resuelve un problema en nuestro presente:
Hasta aquí nada muy asombroso, o quizás ya nos hemos acostumbrado y tomamos este servicio como básico, aún entrañando verdadera dificultad. Ahora, ¿Qué pasaría si el coche o el navegador supiera dónde vamos antes de decírselo? Este es el hecho diferenciador de la tecnología orientada a la inteligencia y dónde radica la verdadera potencia de la aplicación de la inteligencia artificial en estos tiempos: la predicción o el control del futuro.
Personalmente me empieza a resultar asombroso que en la gran mayoría de los casos el navegador acierte y sepa dónde voy, incluso antes de arrancar:
La tecnología orientada a la inteligencia o inteligencia artificial
“Utiliza el pasado”
“Resuelve inteligentemente el presente”
“Propone el futuro”.
Llegados a este punto podemos hacer un buen resumen comparativo:
- La tecnología tradicional suministra el pasado para que la tecnología orientada a la inteligencia lo utilice.
- La tecnología tradicional resuelve el presente al igual que lo resuelve también la tecnología orientada a la inteligencia, pero esta última lo hace de forma más eficiente, de forma inteligente.
- La tecnología tradicional ignora el futuro, sin embargo, la tecnología orientada a la inteligencia lo propone.
Pudiera entenderse que el hecho más práctico y significativo de la inteligencia artificial es la forma en la que resuelve el presente, pero esto es un error, bajo mi punto de vista.
El hecho más relevante de la tecnología orientada a la inteligencia es su descaro cuando nos propone nuestro futuro y el gran temor que infunde es el hecho de que algún día pudiera tomar la iniciativa y cambiar el verbo “proponer” por “decidir”. ¿Qué piensas? ¿llegará ese momento? Llegará el día en que te subas el coche y este arranque y ya te dirija dónde él ha predicho que vas…