Yu’e Bao, el depósito de ahorros del gigante chino del comercio electrónico Alibaba, ha aprovechado el auge de las compras online en el país asiático para crear un auténtico imperio. Gestiona ya un capital de 165.600 millones de dólares, lo que le convierte en el mayor negocio en banca minorista del mundo.
La plataforma de #pagos de #Alibaba, seria competencia para la #banca tradicional Clic para tuitear
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La traducción más certera para Yu’e Bao sería “botín sobrante”, y es ni más ni menos eso: el sitio donde los clientes de Alibaba guardan el dinero que tienen en la filial de pagos Ant Financial (antes conocido como Alipay).
Con este sistema, lo clientes obtienen rentabilidades cercanas al 4%, muy superiores a las de los bancos tradicionales.
De esta forma, Yu’e Bao ha conquistado el enorme y creciente mercado de ciudadanos chinos que compran online.
Tal y como explica Peter Alexander, de la consultora especializada Z-Ben Advisors, “como Ant Financial tiene tantas cuentas individuales, dispone del poder para negociar con los bancos mejores tasas de interés”.
Ha alcanzado además otros hitos, como rebasar al fondo de ahorros del banco estadounidense JP Morgan, hasta ahora considerado el mayor del mundo, y que cuenta con 150.000 millones en cartera.
Un cúmulo de circunstancias favorables
El éxito del negocio financiero de Alibaba está íntimamente ligado a la crisis de las entidades tradicionales.
Los bajos tipos de interés han estrechado, y mucho, los márgenes de rentabilidad que la banca ofrece a sus clientes particulares.
A este factor se suma que el nuevo consumidor, mucho más digitalizado, no tiene reparos en gestionar su dinero a través de Internet, lejos de las oficinas bancarias tradicionales.
Si en este contexto, las mismas marcas a las que compra en Internet y en las que ya confía le ofrecen un sistema de pagos, ¿por qué no aprovecharlo?.
En cualquier caso, la irrupción en este mercado de Alibaba no es una excepción.
Otras firmas tecnológicas, como Xiaomi y Tencent, ya ofrecen servicios de ahorros a sus clientes, además de otros productos financieros para gestionar su patrimonio.
Fuera de China, las grandes tecnológicas globales como Apple, Samsung, Google o, más recientemente Facebook, trabajan desde hace años con plataformas de pago propias, aunque sin adentrarse, por ahora, en la gestión de ahorros.
