El gigante de Internet ha patentado el diseño de un automóvil capaz de autogestionarse por completo, con el fin de poder realizar la distribución de envíos postales.
Google ha contado con el ingeniero Jussi Myllymaki, el artífice de esta idea, presentando el primer vehículo que se destina a la distribución de paquetería y que funciona con total autonomía.
Su creación se basa en una taquilla, tótem o estación de recogida de paquetes automatizada con la novedad de que es móvil, es decir, que se trata de una “plataforma de entrega de paquetes”, como se describe en la solicitud de la patente.
El vehículo autónomo de carretera recibe la información de destino al que se dirige, donde el usuario informado por vía telemática recoge el paquete mediante la marcación de una clave en uno de los compartimentos del vehículo.
Tanto la gestión de la ruta, como la interface entre vehículo y usuario que recoge las mercancías, están asegurados gracias distintos sistemas que ya operan en el mercado.
La solicitud de esta patente se centra fundamentalmente en tres aspectos, como son el vehículo autónomo, donde se incluye la gestión de ruta, posicionamiento y seguido. Otro es el subsistema de seguridad para la mercancía y la interface de acceso a la información y comunicación con el usuario. Y por último el subsistema de pago previo a la recogida.